Manuel Alejandro Cardenete: «El impuesto de sucesiones es el chocolate del loro de la Junta»

-Ha sido miembro del Consejo Económico y Social del Ayuntamiento de Sevilla en el último mandato de Alfredo Sánchez Montseirín. ¿Ese es uno de los organismos públicos que no sirven para gran cosa?

-Se supone que tiene que asesorar al Ayuntamiento pero no tiene poder coercitivo porque es un órgano consultivo, así que podríamos ahorrárnoslo. De hecho, durante la crisis hay comunidades autónomas que han suspendido esos consejos económicos y no ha pasado nada.

-¿Cuáles son las infraestructuras que más necesita Sevilla para su despegue económico?

-La SE-40; las nuevas líneas de Metro para lograr una mayor movilidad y el dragado del río. Hay que tomar una decisión sobre el dragado del Guadalquivir pero aquí nadie se atreve a decir lo que la gente no quiere escuchar: que eso tendrá consecuencias medioambientales. Sin un dragado del río, la Zona Franca de Sevilla no tendrá mucho recorrido porque no podrán entrar barcos de calado.

-La Zona Franca apenas tiene tres empresas y no se sabe aún cómo se va a financiar.

-Es un tema político. La gestión de la Zona Franca debe estar más profesionalizada.

-¿Qué diagnóstico hace de la economía andaluza?

-La economía sigue creciendo gracias al sector exterior, que incluye el turismo y las exportaciones. También el consumo interno se ha animado. El problema es que aunque crecemos seguimos teniendo un paro superior al 27%.

-El último informe de Cáritas explica que la desigualdad, la pobreza y el desempleo están creando una España a dos velocidades.

-Eso es así. La tasa Arope, que mide el riesgo de pobreza y exclusión social, es en España del 28% y en Andalucía del 43%.

-¿La economía sumergida explica que con esa tasa de paro no haya habido un estallido social en Andalucía?

-Se estima que la economía sumergida es del 25% del PIB. Sin embargo, el paro no se visualiza y eso tiene una triple explicación. En primer lugar, aunque nos quejemos, tenemos un gran estado del bienestar en materia de subvenciones, prestaciones... En segundo lugar, aquí las familias, como las italianas y las griegas, son un gran respaldo. Por último, está la economía sumergida, que sin ella esto saltaría por los aires.

-¿La economía andaluza seguirá creciendo en 2017?

-Sí, al 2,5% y la previsión del paro es que seguirá entre el 26 y el 27%.

-¿A medio plazo volveremos a vivir una situación de crisis como la del período 2007-2015?

-A largo plazo todos, todos muertos, como decía Keynes. A corto-medio plazo creo que habrá estabilidad al menos hasta 2020 porque hasta entonces tenemos garantizados fondos europeos en Andalucía. A partir de 2020 no me atrevo a hacer pronósticos, aunque haya economistas que se lanzan a decir números sin ninguna base científica.

-¿Cómo está afectando a Andalucía la prórroga de los presupuestos del Estado?

-Uffff, pues en el escaso grado de ejecución presupuestaria. Hay muchas operaciones que se presupuestaron para 2016 y se ejecutaron, con lo que el dinero prorrogado para 2017 no se ha tocado. Todo está parado, esperando a ver qué pasa. Sólo hay que hablar con los empresarios.

-¿Podemos aguantar un año más España con los presupuestos prorrogados?

-Puede aguantar 2017 pero no 2018. Si llegamos al próximo año con el presupuesto prorrogado, habrá elecciones porque las costuras ya no aguantarán más.

-Hemos gastado cientos de millones de euros en cursos de formación y esta semana nos dicen que Andalucía es la segunda comunidad con menos competitividad de España y una de las últimas de Europa.

-Es que los cursos de formación no eran la panacea. Hubo un fallo de diseño. Había un dinero del Fondo Social Europea para formación y alguien decidió que los cursos iban a ser repartidos entre sindicatos y empresarios para tener paz social y generar una oferta de personas formadas. Ahora tenemos a gente más preparada pero para puestos de trabajo que no necesitamos. Ha faltado conexión entre la demanda y la oferta.

-Después del escándalo de los cursos de formación. ¿Deben seguir gestionándolos los sindicatos y la patronal?

-Yo no los dejaría al margen porque ellos son parte del engranaje para llegar a los desempleados. Habría que ver qué tipos de cursos deben hacerse. En cuanto a los errores del pasado, yo creo que sindicatos y empresarios ya han aprendido la lección, hay cosas que no volverán a pasar... al menos durante un tiempo. La crisis ha traído la filosofía de no despilfarrar el dinero.

-Desde los años 90 Andalucía ha recibido más de 50.000 millones de euros en fondos europeos ¿Cómo explica que a pesar de ellos Andalucía siga siendo el furgón de cola de España y Europa en paro?

-Eso también me pregunto yo. Imagínese que hubiera pasado si no hubiésemos tenido ese dinero. Los fondos europeos han aportado el 7,5% del PIB porque hemos sabido generar riqueza con ellos a corto plazo pero no a largo plazo. ¿Qué infraestructuras hemos hecho con ese dinero? ¿Las que necesitábamos? ¿Era necesario hacer un teatro o una piscina olímpica en todos los pueblos de España? Encima, hay algunos de esos teatros abandonados. Menos mal que no nos dio por hacer aeropuertos.

-¿Cuál es el principal problema económico de Andalucía: el paro, la productividad, la competitividad, la financiación autonómica...?

-Que el crecimiento económico no se traslada al mercado laboral. Sólo tuvimos tasas de paro cercanas a lo razonable cuando hubo un sector, la construcción, intensivo en mano de obra.

-¿Hay que cambiar el modelo productivo, basado ahora en la agricultura, el turismo, la construcción y la industria extractiva?

-Tengo 45 años y me estoy haciendo realista. Andalucía tiene un valor añadido en sol, la tierra, la agricultura, los recursos naturales mineros... ¿Qué tenemos que hacer? Más que un cambio de modelo productivo, lo que tenemos que hacer es más productivo el modelo. En este sentido, hemos logrado tener una industria agroalimentaria, aunque aún le queda mucho por desarrollarse. En cuanto a la minería, siempre hemos tenido esa materia prima pero ahora tenemos que luchar para que esos materiales sean transformados aquí. Otra cosa positiva es que hemos logrado que el sector exterior dinamice la economía durante la crisis. Lo que pide a los empresarios es que cuando las cosas comiencen a ir mejor, no se olviden del sector exterior.

-Hay empresas a las que la salida al exterior ha acabado por hundirlas, como Vimac o Aboga.

-Es que salir al exterior tiene sus riesgos y es complicado. Por ejemplo, tenemos muchas inversiones en Méjico. Cuando se critica tanto al empresario, hay que tener en cuenta que se juega su dinero y puede acabar arruinado.

-¿Qué futuro ve a Abengoa, ahora que ha firmado el convenio de acreedores?

-Abengoa vivió la tormenta perfecta porque sufrió cambios normativos, la bajada del precio del petróleo... e hizo una expansión muy rápida a base de apalancamiento. Ahora está quitando todo lo que le ha provocado perturbaciones, como las inversiones no productivas, y se está centrando en lo que sabe y sigue ganando concursos. Yo creo que saldrá adelante pero no será la Abengoa que conocimos.

-En el resto de España se habla de Andalucía y rápidamente la asocian a paro, ERE y fraude en los cursos de formación. ¿No hemos ganado a conciencia la fama?

-Desgraciadamente sí. Se ha producido un gran pillaje de fondos públicos. El problema es que no sabíamos qué hacer con tanto dinero para que fuera productivo.

-¿Debe la Junta debe financiar los ERE de empresas privadas?

-No. Al final, los ERE se han convertido en un elemento perturbador y perverso. El sector público no está para salvar empresas sino para que todo funcione y garantizar los servicios públicos.

-¿No somos más productivos los trabajadores andaluces tras la crisis y los ajustes de plantillas?

-Absolutamente. Si tenemos menos trabajadores y estamos produciendo casi lo mismo o más que antes, es que somos más productivos.

-Sigue creciendo el IPC y las empresas congelando o recortando salarios. ¿Cuándo recuperarán los trabajadores su poder adquisitivo?

-Eso es un problema grave. Durante la crisis no estábamos peor era porque la inflación era cero o negativa, pero ahora la inflación crece al 3% y los salarios están congelados o se está recortando desde hace años. Como no podemos devaluar la moneda, hemos devaluado los salarios. Los trabajadores están reclamando ya subidas salariales pero si subes las nóminas al 3% igual no lo soporta la estructura de costes de una empresa. Por eso deberían sentarse los sindicatos, el Gobierno y las empresas para que se suba el sueldo en función de la productividad de la empresa y el sector, no en función de la inflación.

-Los empresarios buscan talento pero con sueldos mileuristas que no permiten a los jóvenes independizarse. ¿Eso cambiará o debemos acostumbrarnos a que nuestros hijos no vivirán jamás como nosotros?

-Debemos acostumbrarnos a que eso seguirá ocurriendo. En las películas americanas vemos que casi todo el mundo tiene dos o tres trabajos y que cuando se jubilan siguen trabajando. No es la situación óptima pero en la economía globalizada eso viene para quedarse.

-La Junta adeuda 30.113 millones de euros y apenas puede hacer frente a los créditos. ¿Cuál es la solución: más austeridad o mejor financiación del Estado?

-La Junta necesita más austeridad porque no ha lugar a una mayor presión fiscal en una economía con un paro del 27%. La Junta tiene un presupuesto de 33.500 millones de euros y tiene margen para gestionarlos bien.

-¿Qué opina del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA), que usa el Estado para prestar dinero a las comunidades?

-Que no se pueden mantener de forma eterna créditos a tipo de interés cero. A la Junta de Andalucía se le está creando una gran bola de deuda pública. La Junta no tiene dinero y se lo pide al Estado, que como no tiene se lo pide a Bruselas. Nos estamos engañando.

-¿No sería mejor desmantelar parte de las fundaciones y empresas públicas andaluzas?

-Es una de las vías porque gran parte de los 33.000 millones de euros de presupuesto de la Junta va a personal y edificios. A que poner freno a eso.

-Un andaluz paga 1.200 veces más por heredar que un canario. ¿Aboga por la supresión del impuesto de sucesiones?

-Sí. Lo que no tiene sentido es que cuando heredas tengas que pagar por un bien que ha estado tributando años y por diferentes conceptos. Eso está provocando que las herencias se estén quedando en las notarías porque la gente no puede pagar el impuesto de sucesiones. Aparte de eso, la recaudación del impuesto de sucesiones es el chocolate del loro, sólo representa el 3% de los ingresos de la Junta y, sin embargo, provoca que muchos empresarios no quieran estar domiciliados aquí.

-Somos la comunidad con una renta per cápita más baja, con mayor paro.... pero la Junta nos aplica el tramo de IRPF autonómico más alto.

-Estamos al nivel de Cataluña cuando nuestro PIB está 30 puntos por debajo del catalán. Esto es consecuencia del desarrollo del estado de las autonomías. Rodríguez Zapatero cedió impuestos a las comunidades autónomas para que recaudaran más, dejando un colchón para actuar. Al final hay algunas, como Cataluña y Andalucía, se han ido al máximo. El problema es que si tienes un agujero y tus ingresos dependen del IRPF, ¿cómo los bajas?

-¿Se puede mantener mucho tiempo este sistema de desigualdad tributario?

-No. Se ha abierto ya la caja de Pandora y al final habrá armonización para evitar el dumping y que cambios de este tipo haga que la gente se mueva en función de los impuestos. Madrid puede permitirse bajar el IRPF pero Andalucía no. Así que a Andalucía sólo le queda recortar gastos.

-¿Tiene sentido en pleno siglo XXI los regímenes forales de Navarra o País Vasco?

-No pero como tiene una tradición de siglos de historia vamos a ver quién es el guapo que dice «hasta aquí llegamos» y coge la Constitución y elimina los regímenes forales de Navarra y País Vasco. Hay cosas que no se discuten porque eso no tiene otra solución que no sea una ruptura.

-Ha sido asesor técnico de la consejería de Economía de la Junta en el año 2000, cuando Magdalena Álvarez era su titular. ¿Le recomendaría a Susana Díaz que dejara la presidencia de la Junta para ocuparse de la secretaria general del PSOE o puede compaginas ambas cosas?

-La dirección de un partido como el PSOE necesita dedicación exclusiva. Me sorprende cuando veo a María Dolores de Cospedal que es ministra de Defensa, secretaria general del partido, presidenta del PP de Castilla-La Mancha y madre. Eso no me cuadra.

-El PSOE gobierna Andalucía desde hace 36 años pero seguimos con la tasa de paro más alta de España y nuestra renta per cápita es el 70% del la media española. ¿Hace falta un cambio político en Andalucía?

-Sí, por higiene. Fíjese que veíamos como algo anecdótico lo del PRI en Méjico. Hemos visto lo que ha pasado como CiU en Cataluña después de tantos años gobernando.