Zoido cree que la zona franca es viable «con o sin dragado»

El Ayuntamiento hispalense, de cualquier modo, es "optimista" en cuanto al proyecto de la zona franca y espera que el Estado resuelva positivamente su solicitud. Recientemente, como se recordará, el alcalde entregaba al ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, el expediente promovido por el Ayuntamiento hispalense para solicitar la autorización estatal necesaria para la creación de una zona franca en el Puerto hispalense, un proyecto que el primer edil defiende como un "imán" para las empresas.

La creación de la zona franca abarcaría un total de 719.876 metros cuadrados pertenecientes al dominio público portuario del Estado y el Ayuntamiento calcula un volumen aproximado de mercancía que asciende a 1.733.990 toneladas.

Poco después, el presidente de la Cámara de Comercio, Industria y Navegación, Francisco Herrero, manifestaba públicamente que la creación y desarrollo de la zona franca "dependerá en buena medida" de que el dragado de profundidad promovido por la Autoridad Portuaria en el río Guadalquivir se haga realidad. "El Puerto, sin dragado, está abocado a la muerte", avisaba Francisco Herrero.

El alcalde, en ese sentido, ha explicado este martes, en declaraciones a los medios de comunicación, que el Gobierno municipal está "esperando a que concluya el trabajo de los técnicos del Ministerio" para cosechar la preceptiva autorización y crear la zona franca. "Somos optimistas", ha manifestado el primer edil. Igualmente, Zoido ha defendido que el proyecto de la zona franca goza de "su propia viabilidad desde la perspectiva del desarrollo económico y social, con o sin dragado".

"El dragado puede aportar efectos positivos a la zona franca, sin duda, pero si no se hiciese el dragado o tardase, la zona franca tendría su propia viabilidad económica y social", ha resumido el alcalde. No obstante, el primer edil de Sevilla ha manifestado que el Ayuntamiento espera "una solución directa e inmediata" al proyecto impulsado por la Autoridad Portuaria para el dragado de profundidad del río, cuya autorización final depende del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente. "Apostamos por el dragado del río", ha señalado el alcalde, quien ha conectado directamente esta apuesta con la aplicación de las necesarias "medidas medioambientales" destinadas a la "preservación" de los valores naturales del Guadalquivir.