Preguntan a Jordi Cruz qué es lo que nunca le perdonaría a un cocinero y es rotundo en su respuesta: «No me suelo equivocar»

Con apenas 24 años, Jordi Cruz obtuvo su primera estrella Michelin, convirtiéndose en el cocinero más joven de nuestro país en recibir esta distinción y el segundo del mundo. Actualmente, forma parte del equipo directivo del restaurante ABaC, en Barcelona, que cuenta con tres estrellas Michelin. Además, dirige otros proyectos como Ten's Tapas Restaurant y Atempo.

El chef español se pasó hace unos días por el podcast de gastronomía 'Se me antoja', en el que habló sobre distintos aspectos de su vida personal, como la paternidad, y ahondó también en cuestiones relacionadas con su profesión, como la presión a la que debe hacer frente o su capacidad de liderazgo.

Jordi Cruz no tuvo problema en contestar a diferentes cuestiones sobre sus negocios en restauración y la forma en la que gestiona a su equipo. En este sentido, el chef español también se pronunció sobre qué es lo que más valora en un cocinero y cuál considera que es el mayor defecto.

«¿Qué no le perdonarías a un cocinero tuyo?», le pregunta Javi Antoja al popular chef español, que responde de forma tajante: «La pereza, porque cuesta lo mismo hacerlo bien que mal. Inviertes el mismo tiempo».

El jurado de 'MasterChef' reconoce que la experiencia profesional de un cocinero que se incorpora a su plantilla no es lo más importante: «Cuando vienes a mi casa, me da igual lo que sepas hacer, porque lo que vas a hacer aquí es diferente, singular. Por lo tanto, te lo voy a enseñar».

En este sentido, Jordi Cruz insiste en la importancia de la actitud a la hora de ganarse su favor como trabajador: «¿Y qué me tienes que dar tú? Ganas. ¿Qué es la antítesis de las ganas? La pereza... Eso es lo que no me sirve para nada».

El chef español se explica a continuación: «Ya que inviertes tu tiempo en hacer algo que no quieres hacer, que es trabajar, que te aleja de tus seres queridos, que te quita tu tiempo libre tan valioso, ya que lo vas a dedicar aquí... ¿Qué te voy a dar yo? ¿Un vil metal? Pues ya que lo dedicas a estar aquí, métele putas ganas».

El presentador del podcast se interesa entonces por saber si el chef español detecta con facilidad este tipo de perfiles. «¿Y tú eso lo hueles? ¿Lo olfateas en el equipo?», le pregunta. «Sí, el primer día. Llevo 30 años gestionando personas», asegura el chef, que señala que «cuando entran por la puerta digo: 'aquí hay ganas o no hay ganas y ya está'».

No obstante, Jordi Cruz admite que intenta dar unos días de margen para que el cocinero demuestre sus aptitudes. «Como tengo esa capacidad y esa facilidad, ya la tengo tan alimentada que la pongo en duda. Digo, dale tres días, cállate la boca y déjale que demuestre y haga porque te puedes equivocar, ¿no?».

Sin embargo, el chef presume de tener buen olfato: «No me suelo equivocar, las ganas se notan y la pereza también».