Parodia

Lo absurdo de creer que 'Sálvame', tan lleno de gente de derechas, desaparece por lo de «rojos y maricones» se desactiva cuando te preguntas (y contestas) quién daría más votos al PP, si Ana Rosa o Jorge Javier. Como si no se votara a la contra.

Por la misma razón, supongo que el reproche a Bildu de tener 44 candidatos condenados por pertenencia a ETA (siete con delitos de sangre) no perjudica a Bildu, al menos en sus expectativas de voto. En todo caso le perjudicaría en su pretensión de influir en la política desde Madrid. En su futura relación con un Sánchez que volviera a gobernar necesitando sus votos en el Congreso. Tras desvelar Covite lo de los 44 de Bildu, se aprecia un desgaste en el PSOE, pero, claro, fuera del territorio donde se vota a Bildu. Ya lo tuiteó Josu de Miguel: «Estoy completamente seguro de que tras la polémica de los etarras en sus listas, Bildu va a crecer aún más en términos electorales. Conozco muy bien a mis paisanos». Cuando Ayuso dice que la ley de Bienestar Animal seguramente se ha hecho para gente como Otegi, que la había incluido en las cloacas, regocija a los suyos y enardece a quien tiene la oportunidad de votar a Bildu. Nicolás Redondo Terreros reconoce lo obvio, que el problema no es a quién lleva Bildu en sus listas, el problema es la relación que ha tenido el PSOE con Bildu.

El problema es que hay mucha gente que prefiere votar al que ha pactado con Bildu y seguramente lo volvería a hacer antes de que llegue la derecha al poder. En 'Polònia', el programa satírico, han descubierto que Ana Rosa también ha comprado TV3 para echar a «los rojos catalufos» (y claro que allí los rojos no son lo que abunda). El problema es que lo que aparece en un programa satírico no es muy diferente de la política real. Que a veces es difícil la parodia de lo que ya tiene la parodia de la política como pecado original.