El policía de Nanterre acusado de matar a Nahel practicó exhibicionismo sexual
El agente niega haber pronunciado la frase «vas a recibir una bala en la cabeza»
Prisión provisional para el policía acusado de disparar contra Nahel M., el joven de 17 años muerto en Nanterre
Policía durante las manifestaciones tras la muerte de Nahel
El policía inculpado judicialmente por el delito penal de homicidio voluntario seguirá en prisión, tras las investigaciones de la Inspection générale de la Police nationale (IGPN), que ha descubierto acciones de «exhibicionismo sexual».
Varios medios de reputada solvencia han podido consultar, el informe preliminar ... de la IGPN sobre la muerte de Nahel * (17 años), en Nanterre, precipitando seis días de manifestaciones, protestas, vandalismo, incendios.
Tras escuchar el vídeo que fue el primer documento, la IGPN escribe: «Al principio de la secuencia, se escuchan tres voces diferentes (V1, V2, V3), antes de la detonación, que nosotros interpretamos así: V1: '… una bala en la cabeza'. V2. '… ¡corta, corta..!'. V3: '… hazte a un lado'. V1: '… vas a recibir una bala en la cabeza' (afirmación que puede atribuirse a P1, que agita su brazo en ese momento«. V2: ¡Corta..1!'».
El verbo utilizado por la prensa francesa para presentar el informe preliminar de la IGPN es el verbo «tuer», que suele traducirse por «matar». «Tuerie» suele traducirse por «matanza». Acusado por el fiscal de homicidio voluntario, el policía encarcelado «mató voluntariamente». El diccionario de la RAE estima que «asesinar» es «matar a alguien con alevosía».
Según el vídeo analizado por la IGPN, la voz que afirma «vas a recibir una bala en la cabeza» parece confirmar la terminología del fiscal que ordenó la prisión del policía acusado de homicidio voluntario.
La revelación de exhibicionismo sexual solo es un matiz penalmente insignificante. Solo aporta un detalle «psicológico».
El policía encarcelado niega haber pronunciado la frase «vas a recibir una bala en la cabeza», como afirma la IGPN. Su acompañante, durante el «incidente» que costó la vida a un adolescente, también niega. El vídeo analizado por el fiscal y los inspectores que instruyen el caso confirma que ambos policías mantuvieron sus pistolas automáticas, «Sig Sauer», apuntando en dirección del conductor que no obedeció a la orden de pararse.
Durante el último año y medio dieciocho personas que se negaban a detener sus vehículo, como les ordenaba la policía, murieron en Francia abatidas a tiros.
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