El pasado martes, el joven Nahel se negó a detener su coche en un control policial en la ciudad de Nanterre, la oeste de la capital. El momento, que fue capturado en vídeo, muestra cómo un agente de la Policía les dispara, provocando su muerte por una herida en el tórax. Los servicios de Emergencia no pudieron hacer nada por salvarle la vida.
El gendarme, según informa BBC, afirma que presionó el gatillo porque sintió que su vida estaba en peligro; ahora está bajo custodia por cargos de homicidio voluntario.
Un grupo de presos intentó fugarse
El asesinato de Nahel ha provocado una serie de revueltas callejeras tan violentas que han llegado al centro penitenciario de Fresnes, en Valle del Marne, de acuerdo con lo publicado en Le Figaro (LF).
Sobre la una de la madruga de este jueves, un grupo de protestantes dispararon morteros e incendiaron la calle en la que se ubica dicha prisión, provocando que se accionase una alarma que se escuchó en toda la localidad y sus alrededores.
Poco después, según LF, un grupo de personas encapuchadas intentaron entrar por la fuerza en la cárcel para intentar liberar a los presidiarios, aunque sin éxito.
Los equipos de Seguridad enitenciaria Local de Fresnes se movilizaron para proteger las instalaciones del lugar, y el Equipo Regional de Intervención y Seguridad de París se puso a disposición del centro para reforzar la zona, logrando así neutralizar la revuelta y que no fuese a mayores. Finalmente, ningún preso logró escapar del centro.
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