A media tarde del martes, un par de policías que patrullaban en Nanterre ordenaron a un joven que parase su coche. Ante la negativa del joven, uno de los policía comenzó a disparar, matando al adolescente.
Las fuerzas de seguridad intervinieron con rapidez. El policía autor de los disparos que mataron al joven de 17 años fue detenido y puesto a disposición judicial. Pero estalló una ola de indignación callejera en los barrios más modestos de Nanterre.
La difusión de un vídeo, a través de las redes sociales, agravó la indignación, mostrando con mucha claridad como el policía disparó fríamente sobre el joven que se alejaba.
La cólera continuó creciendo hasta el filo de la madrugada, cuando estallaron enfrentamientos muy violentos. Bandas de jóvenes armados de estacas organizaron manifestaciones de cólera grave y muy dura, protestando contra el gobierno. En muchas ocasiones, los manifestantes montaron barricadas improvisadas, pegando fuego a cubos de basura y automóviles.
Los coches de bomberos que se apresuraron a intervenir tuvieron que enfrentarse a bandas de jóvenes que los atacaban a pedradas y cócteles molotov.
Al filo de la media noche, los enfrentamientos violentos entre bandas de jóvenes y fuerzas del orden eran muy espectaculares cerca de la prefectura de Nanterre.
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