Risotto de bogavante

Si de entre todas las recetas navideñas te decides por preparar ésta, comienza haciendo el caldo de bogavante . Para ello, separa la cabeza del bogavante del resto del cuerpo. Reserva las pinzas y la cola para el arroz. Parte la cabeza por la mitad para saltearla en una cazuela con un poco de aceite de oliva y un puerro. Cuando todo comience a dorar, incorpora el vino y cúbrelo todo con agua fría. Deja hervir el caldo a fuego suave durante 45 minutos, sin olvidarte de ir desespumando de vez en cuando. Transcurrido ese tiempo, retira del fuego, cuela el caldo y resérvalo.Por otra parte, corta en dados la cebolleta y la zanahoria. Ponlo todo en una cacerola con un poco de aceite de oliva y sofríelo. Cuando comience a dorar, incorpora los tomates (pelados y sin semillas) y el calabacín troceado. Cocínalo todo otros 20 minutos a fuego suave.Mientras tanto, prepara una olla con un poco de agua y sal y cuece, durante 4 minutos, las pinzas y la cola del bogavante. Pasado ese tiempo, saca las piezas del agua y retírale las cáscaras. Corta la carne del bogavante en cuadrados regulares y resérvala. Agrega ahora el arroz a las verduras y rehógalo todo. Vierte un buen cazo de caldo de bogavante sobre el arroz y remuévelo todo. A medida que se vaya consumiendo el caldo, habrá que ir añadiendo más a la cacerola, a medida que el arroz lo pida. De esta manera nos quedará meloso, que es lo que se busca para el risotto.Cuando el arroz esté casi cocido, incorpora los dados de bogavante. Retira del fuego y lígalo todo con el parmesano .Termina con un poco de perejil picado por encima antes de servir.

A este plato, que hoy presentamos como una de nuestras recetas navideñas, le va muy bien un poco de cebollino picado para decorar o cualquier otro toque verde que dé color al plato.

El risotto es un plato típico italiano. Para elaborarlo, se usa la variedad bomba para que el resultado sea meloso y suave. El queso de la receta aporta grasas, de las que se puede prescindir en caso de seguir una dieta de adelgazamiento o si se tiene alergia a la lactosa. El bogavante, al igual que el resto de mariscos, aporta proteínas y debe ser consumido con moderación en caso de hiperuricemia.