Drama Queen
Alonso Caparrós, sobre su paso por 'Sálvame': «Me sirvió para aliviar mis penas»
Tras su paso por 'Gran Hermano' le ofrecieron colaborar en el programa vespertino de Telecinco. Y aunque los inicios no fueron fáciles, allí vivió «el punto de inflexión de mi vida»
Alonso Caparrós: «Me angustió muchos años tener menos dinero y estatus»
Alonso Caparrós: «Mi problema con las drogas me ha estigmatizado y es injusto»
Alonso Caparrós: «Por primera vez siento que soy un buen padre»
Hubo una época en la que Alonso Caparrós se convirtió en el hombre del momento, el presentador de moda. No obstante, con el paso de los años pasó de ser un rostro habitual de la pequeña pantalla a no aparecer. Durante ese tiempo alejado ... del foco, el televisivo «lo había dado todo por perdido. Me había rendido entre comillas». Es más, dejó de vivir en Madrid para comenzar una nueva etapa «en un pueblo de Málaga». Pero poco a poco volvió a hacer pequeñas colaboraciones en el medio que le dio la fama, lo que motivó que le llamasen de 'Gran Hermano': «Nada de lo que pasó a partir de ese momento estaba previsto».
El televisivo califica su participación en el programa de convivencia de «lamentable». Aún así, un día le ofrecieron comenzar una nueva andadura televisiva en 'Sálvame': «Tampoco estaba pensado. Allí estalló todo y fue el punto de inflexión de mi vida: la bronca con mi familia, con mi padre... Aquella confesión de todo lo que yo había sido». A partir de entonces, como cuenta Caparrós a Pilar Vidal en Drama Queen, el pódcast de ABC, lo que hizo fue «moderar esa imagen que había quedado muy tocada en lo profesional». Eso sí, en el terreno personal «me sirvió para aliviar todas mis penas».
Los inicios de Alonso Caparrós no fueron fáciles: «Era un trabajo con el que disfrutaba mucho como profesional, pero que me costaba mucho, en el día a día, hacerlo». Y es que, cuando comenzó «no tenía esa seguridad de decir 'bueno, que sea lo que Dios quiera'». Todo esto porque era un «momento de mi vida en el que estaba trabajando en recuperar una imagen que se había visto muy menoscabada con contar mi historia». «Yo siempre estaba muy pendiente o muy preocupado de la imagen porque tenía que recuperar cierta seriedad», explica Caparrós.
Estigma por las adicciones
Además, el tertuliano está «prácticamente convencido de que el problema de la estigmatización con determinadas cosas, en este caso las adicciones, es una realidad muy muy clara». También destaca que, en cierta forma, lo entiende: «Seguramente si yo estuviese en la posición de muchos directivos y jefes yo haría lo mismo. Si tuviese que decidir entre varios presentadores y uno de esos fuera yo, yo tendría en cuenta el pasado de esa persona».
Ver comentarios