La épica marcial de Edurne se batirá contra duetos y baladas en Eurovisión 2015

Preciamente, Suecia, un año más gran favorita ante el bajo nivel general, es de los escasos contendientes conectados con la música que triunfa a nivel global en las radiofórmulas gracias al «hit» de Mans Zelmerlöw «Heroes», el cual, todo sea dicho, se parece sospechosamente a «Lovers on the sun», la colaboración con el DJ David Guetta de su compatriota Avicii.

Actual y potente también es la propuesta de Australia (sí, Australia), gran novedad en el listado de países a concurso. Para su estreno oposita al triunfo con el experimentado Guy Sebastian, juez del programa de televisión «The X Factor» en su país, y con el tema «Tonight again», de ese estilo «disco-funk» que tan bien les funciona a Mark Ronson y Bruno Mars.

Trasplantando el modelo de producción del fenómeno neozelandés de Lorde («Royals») llegará a Eurovisión el joven belga Loïc Nottet con «Rhythm inside», mientras que la eslovena Maraaya aúna pasado y presente en «Here for you», corte bailable de regusto retro como el «No mercy» de Duffy, y la exótica letona Aminata combina en «Love injected» electrónica y «soul», al estilo de FKA twigs.

El último triunfo del festival suele marcar la pauta de la edición siguiente, y la grandilocuencia «jamesbondiana» de la austríaca Conchita Wurst se deja sentir en una mayor instrumentación orquestal y en el tono emotivo de las canciones, con predominio de baladas como la elegante pieza noruega «A monster like me», de Mørland & Debrah Scarlett.

Italia, gran rival de Suecia por el triunfo, aúna ambas bazas con unos candidatos que además gozan de renombre fuera de sus fronteras, el trío de jóvenes cantantes líricos Il Volo, que se hicieron con la victoria en el último Festival de Sanremo con «Grande amore».

Destacan además las propuestas de Malta (con la épica «Warrior» de Amber), Rusia (la bellísima Polina Gagarina canta «A million voices»), Azerbaiyán (Elnur Huseynov con «Hour of the wolf») y la típica elegancia francesa de Lisa Angell con «N'oubliez Pas», un tema compuesto por el hermano pequeño de Jean-Jacques Goldman por el aniversario del fin de la II Guerra Mundial.

Entre las más poperas, sobresalen los mediotiempos de Islandia «Unbroken», que canta Maria Olafs, y «Warrior», de Georgia, probablemente la gran competencia del «Amanecer» de Edurne por su parentesco musical, más desarrollada de la cantante insular, pero con un estribillo menos pegadizo que el "EEeEEeO" de la madrileña.

La influencia de los holandeses The Common Linnets, segundos en 2014 con un suave tema «country», está presente en una versión más pop en la estonia «Goodbye to yesterday», otra favorita, que interpretan Elina Born y Stig Rästa.

Son una de las muchas parejas de esta edición, como las de Lituania, San Marino, Noruega, República Checa o la de la mismísima Reino Unido, con Electro Velvet, que interpreta «Still in love with you», un atípico «electro-swing» que despierta tantos amores como odios: no en vano ha sido calificada en su propio país como «la peor canción enviada nunca a Eurovisión».

A quien no habría que perder de vista es a Finlandia y su brevísimo pero pegadizo tema de «punk» «Aina Mun Pitää», interpretado por cuatro músicos con discapacidad intelectual, Pertti Kurikan Nimipäivät, con más opciones al triunfo que la polaca Monika Kuszynska, discapacitada física de gran voz, pero con una balada previsible, «In the name of love».