El PSOE se queda solo en Europa en el rechazo a los abusos de periodistas en Marruecos

El texto aprobado se refiere en concreto a la exigencia de que sean liberados periodistas como Omar Radi, Sulaiman Raisuni y Taufik Buachrine, detenidos sin haber sido aún juzgados. También se pide que las autoridades pongan fin al acoso a sus abogados y a sus familias.

El Parlamento menciona expresamente el caso del periodista español Ignacio Cembrero, al que Marruecos ha acosado con denuncias ante la Justicia española en varias ocasiones y que se ha quejado públicamente de la falta de apoyo por parte del Gobierno español.

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La resolución fue aprobada por 356 votos a favor, 32 en contra y 42 abstenciones. Los eurodiputados españoles del PSOE presentes, salvo Iratxe García, (17) han votado en contra, mientras que el resto del grupo socialista sin excepciones ha aprobado esta declaración. Los demás votos negativos corresponden a diputados de la extrema derecha francesa y a no inscritos. El grupo Popular Europeo no ha participado ni en la redacción ni en el voto (excepto media docena de eurodiputados) porque ha adoptado el criterio de no participar en la elaboración de nuevas resoluciones de urgencia como esta, hasta que no se regule su uso, dado que el caso 'Qatargate' ha demostrado que podían ser vulnerables a las interferencias externas. Sin embargo, los diputados de Ciudadanos, Izquierda Unida, Podemos y Vox han apoyado la iniciativa.

El texto aprobado denuncia que la policía marroquí utiliza sistemáticamente las falsas acusaciones de agresión sexual para intimidar a los periodistas en el desempeño de sus funciones. Asimismo, se condena la vigilancia de los informadores, incluyendo una mención expresa al uso del programa espía Pegasus. Existen indicios y testimonios que confirman que Marruecos ha utilizado este programa para interceptar los teléfonos móviles de opositores y gobiernos de otros países y de hecho los ataques y denuncias contra Cembrero se deben a que ha denunciado expresamente ese hecho.

Se sabe que el teléfono móvil del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha sido espiado y en varias informaciones se ha dado por hecho que había sido Marruecos. Sánchez decidió personalmente después cambiar la política de relaciones de España con el Magreb con un brusco giro a favor de Marruecos. Finalmente, la esperada cumbre bilateral entre Marruecos y España, tendrá lugar en Rabat el 1 y 2 de febrero próximos y se espera que sea la culminación de este giro. La proximidad con la fecha podría justificar que se hubiera instruido a los eurodiputados del PSOE a no apoyar esa resolución que pide a los gobiernos de los países miembros que usen su influencia «para lograr mejoras concretas en la situación de los derechos humanos en Marruecos».

El pleno también deja constancia de su «profunda preocupación por las acusaciones de que las autoridades marroquíes han corrompido a diputados al Parlamento Europeo» y pide que se apliquen a los representantes de Marruecos las mismas medidas que ya se han implantado en el caso de los representantes de Qatar.