Almeida unirá la plaza de Cibeles y la Puerta de Alcalá con un bulevar y menos carriles de tráfico

El bulevar «va a ir de Cibeles hasta la subida de la Puerta de Alcalá, el monumento quizá más significativo y reconocido de Madrid, restaurado con 2,5 millones de euros, para que pueda ser visitado sin afectar a las condiciones de movilidad», ha explicado Almeida. El objetivo municipal es generar un «espacio público y peatonal» para que madrileños y turistas puedan acercarse «a un monumento tan querido». «Estamos ya redactando el proyecto para después licitarlo y ejecutarlo. La previsión que manejamos es empezar las obras a finales de este año y que concluyan a principios de 2026», confirma un portavoz del Área de Obras y Equipamientos, la concejalía que ejecuta los trabajos.

Poco después del anuncio del alcalde, el Área de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad ha difundido más detalles de la «reordenación de la calle Alcalá entre Cibeles y Puerta de Alcalá» para crear ese bulevar central. Los carriles de tráfico existentes se van a reducir a dos por sentido; actualmente hay cuatro en dirección a Cibeles y tres hacia la Puerta de Alcalá. La mediana resultante tendrá 7,5 metros de ancho y estará bordeada de «árboles, plantas y una amplia zona de paseo para peatones».

La propuesta, que ha partido de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, es «ganar espacio para el peatón en el entorno de la Puerta de Alcalá, además de favorecer el uso turístico de este espacio», explican. También ensancharán el carril bici en dirección a Cibeles, hasta los 2,6 metros, para que sea de doble sentido y con la seguridad de un resguardo de 0,7 metros respecto al carril bus. Antes de ponerse manos a la obra, el ayuntamiento necesitará el visto bueno de la Comisión de Patrimonio y de la Unesco para modificar un pedacito del Paisaje de la Luz.

Además de este nuevo paseo, Almeida ha aportado algunos detalles de otros proyectos previstos para este mandato. El cubrimiento de la M-30, a la altura del puente de Ventas, una pasarela vegetal que costará 80 millones, y el soterramiento del norte del paseo de la Castellana, un kilómetro que se transformará en 80.000 metros cuadrados de zonas verdes. El consistorio licitará la redacción y ejecución de ambas obras «antes de que acabe el primer semestre del año», ha asegurado el regidor.

La reforma de la glorieta del Emperador Carlos V es otro de los planes que se redactarán en los próximos meses y que depende de las obras que está realizando la Comunidad de Madrid en los alrededores de Atocha para ampliar la línea 11 de Metro. En el desayuno, Almeida ha respondido a preguntas sobre otros macroproyectos, como el desarrollo de Madrid Nuevo Norte, la futura 'city' (distrito financiero, en inglés) que «está avanzando», y la Operación Campamento, que también marcha «bien» y «en colaboración con el Ministerio de Vivienda» para levantar 10.000 pisos en unos antiguos cuarteles. Y la transformación del distrito de Usera, que este verano tendrá dos arcos de entrada «y nos situará en ese grupo de ciudades que tiene un Chinatown».