Galicia ampliará en un 50% el parque público residencial en cuatro años con 250 millones

Así consta en la estrategia de la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda aprobada este jueves por el Consello de la Xunta en su reunión semanal, y de la que dio cuenta el presidente, Alfonso Rueda, en la comparecencia posterior. El mandatario recordó que facilitar el acceso a la vivienda es una de las «prioridades» de su gobierno. Máxime en el contexto actual donde los importes siguen una tendencia inversamente proporcional a la disponibilidad. Ahí se enmarca la dotación de 247 millones a la que se dio luz verde en San Caetano. De esa cantidad, explicó Rueda, un 70%, casi 170 millones, se bombeará con medios propios; mientras que el 30% restante procederá de fondos Next Generation (58,5 millones) y fondos finalistas del Gobierno central (20 millones).

Actualmente, informó el ejecutivo autonómico, el parque público de la Xunta está integrado por 3.788 viviendas propiedad del Instituto Galego da Vivenda e Solo (IGVS) y de la empresa pública Xestur. Se adjudican en régimen de alquiler a precios accesibles y regulados entre las personas inscritas en el Rexistro Único de Demandantes de Galicia. En esa bolsa entrarán los algo más de 1.800 nuevos inmuebles.

En cuanto a su desglose, el grueso, 959 viviendas, son obra nueva que construirá directamente la Xunta, a través del IGVS, en las grandes ciudades. Se les sumarán 260 inmuebles que ejecutarán promotores privados y concellos, que se beneficiarán de las ayudas convocadas el pasado mes de febrero para viviendas en régimen de alquiler social en edificios energéticamente eficientes.

Del programa Rexurbe, creado por la Xunta en 2017, para comprar edificios y solares en estado de abandono, en centros históricos y rehabilitarlos, saldrán otras 157 viviendas. Se añadirán otras 331 con otro programa autonómico, el de ayudas para recuperar inmuebles y edificios de propiedad municipal, en concellos de menos de 20.000 habitantes. Y, por último, se incluyen las 125 viviendas que la Xunta ha comprado o lo hará «próximamente» a la Sareb y Abanca.

Adicionalmente, explicó el presidente autonómico, se seguirá fomentando la construcción de vivienda protegida, a través de empresas privadas o cooperativas, para llegar a 3.000 en los cuatro años que abarca la estrategia aprobada ayer. La Xunta pondrá a disposición de las promotoras interesadas el suelo urbanizado que tiene disponible en estos momentos: 17 parcelas con una capacidad para albergar, detalló Rueda, más de 1.000 viviendas.

Para cubrir esas 3.000, la Xunta tiene en cuenta las casi 1.600 que estarán disponibles en Navia, en Vigo, donde se sigue trabajando en el acondicionamiento del suelo a tal efecto; y las 500 que hay proyectadas en La Coruña, donde la Xunta promueve un cambio de uso residencial para aumentar en ese medio millar las viviendas que hay proyectadas en dicho barrio. Adicionalmente, se informó desde San Caetano, el gobierno gallego planificará nuevos desarrollos de suelo público de la mano de los concellos, para destinarlos a vivienda donde haya demanda.

En un contexto más amplio, desde la Xunta se recordó que su estrategia para la promoción de vivienda pública y el impulso de VPO se incardina en el acuerdo suscrito a comienzos de 2021 con los principales agentes públicos y privados implicados en el sector residencial de la Comunidad, el denominado 'Pacto social por la vivienda 2021-2025'.

Una hoja de ruta con cuatro grandes líneas estratégicas. La primera, centrada en el acceso a la vivienda, canalizada a través de la estrategia aprobada este jueves.