Según la sentencia, a la que ha tenido acceso Ep, la mujer accedió al encuentro con la droga, que llevaba en ocho bellotas de hachís, junto a otros pequeños envoltorios, en una cita del 14 de abril de 2023.
A continuación, el hombre ocultó tres bellotas e ingirió el resto pero no pudo volver a su celda al ser descubierto con unas sustancias estupefacientes valoradas en el mercado ilícito por encima de los 400 euros.
Tras conocer lo ocurrido, el preso fue trasladado al hospital de Salamanca, donde le hicieron pruebas y los facultativos vieron que tenía droga en su interior, que después expulsó, salvo la última de las bellotas que echó posteriormente en el hospital de Valladolid.
En cuanto a las condenas, la Audiencia Provincial de Salamanca ha acordado la suspensión de la pena para la mujer, sin antecedentes, con el requisito de no delinquir durante los próximos tres años.
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