El ADN confirma la identidad de Samuel, el niño inmigrante hallado muerto en Barbate

Samuel desapareció tras haber embarcado en compañía de su madre en una patera junto a otras diez personas el pasado 14 de enero con la intención de alcanzar las costas europeas. Todo indica que la patera zozobró. Los cadáveres de cinco de los ocupantes de la patera aparecieron en las costas de Tarifa y Algeciras días después. El 27 de enero fue hallado el cuerpo de Samuel en una playa de Barbate , el de su madre, que se daba por desapecida fue localizado posteriormente en la costa africana.

Al pequeño, cuya identidad se desconocía en aquel momento, por el estado en el que se contraba el cuerpo se le llamó el «Aylan español» en alusión al niño sirio cuyo cadáver fue fotografiado en la costa griega en 2015. Las investigaciones determinaron que podría tratarse de un niño congoleño cuyo padre, Aimé Kambamba creyó reconocer el abrigo marrón que llevaba cuando fue lozalizado el cuerpo del niño.

Aimé se personó en la Embajada de España en Kinshasha para solicitar que le permitiesen viajar a España para identificar el cadáver, después de que recibiera la noticia de que la madre de Samuel, Véronique Nzazi , había aparecido muerta en las costas de Argelia. Véronique había solicitado sin éxito hacía un año un visado para viajar a Europa a operarse de un tumor en el cuello.

El Gobienro español accedió a la concesión del visado de corta estancia al padre de Samuel para que se sometiera a las pruebas de ADN para así confirmar la identidad del pequeño. Aimé se sometió la pasada semana a la prueba que los laboratorios de la Guardia han finalizado ahora con resultado positivo.

Ahora podrán iniciarse los trámites de repatriación del cadáver a la República Democrática del Congo.