La Junta «olvidó» 127 millones de euros para luchar contra las riadas en Málaga

Según ha desvelado el alcalde, Francisco de la Torre, tras invertirse tres millones, se produjo la transferencia de las cuencas hidrográficas , mediante la que la CHG, entre otras, pasó a manos de la Junta. Entonces nunca más se supo. «No he conseguido saber qué pasó con ese expediente. Se transfirió a la Junta y se evaporó», afirmó el lunes De la Torre, apenas 24 horas después de las inundaciones que volvieron a causar un buen número de estragos en la ciudad .

Es por ello que De la Torre ha exigido a la administración regional colaboración para hacer frente a las riadas y evitar sus efectos en lo posible. La extrema vulnerabilidad de Málaga ante el agua volvió a quedar patente el pasado domingo. Las escenas de caos generadas por la tromba que se desató durante la madrugada se han convertido ya en una estampa demasiado habitual para una ciudad que se vanagloria de haber dado un salto cualitativo en la última década, pero que en cuanto llueve más de la cuenta se ve absolutamente sobrepasada.

En menos de cinco años, han sido tres las ocasiones en que el desborde de arroyos y la incapacidad de la red de saneamiento para absorber el agua caída han provocado todo tipo de destrozos. Por ello, el Ayuntamiento de Málaga trabaja ya en un plan global de actuaciones para mejorar la defensa de la ciudad ante la pluviometría. «No hay ciudad que soporte una precipitación como la del domingo, pero hemos de ser más sólidos», defendió ayer el alcalde, Francisco de la Torre. En sólo dos horas, y en puntos muy localizados de la capital —Centro y zona Este— se recogieron más de 146 litros.

En concreto, el Consistorio prepara un programa de obras de infraestructura cuyo objetivo general será el de propiciar que las lluvias viertan al mar mediante los numerosos arroyos que existen en la capital, dado que las canalizaciones del saneamiento se ven habitualmente incapaces de hacer frente a las grandes avenidas. Para ello es necesario actuar sobre esos cauces, que también se ven sobrepasados. Se trataría de mejorar sus capacidades de desagüe, dándoles mayor profundidad y hormigonando su lecho para que el agua discurriera con mayor velocidad.

Este plan tendría un coste de entre 25 y 40 millones de euros y para su ejecución el Ayuntamiento, según adelantó ayer De la Torre, no descarta incluso incurrir en un «endeudamiento discreto» que permitiera afrontar de inmediato las obras más importantes. También se buscará financiación desde fondos europeos.

Pero el alcalde, que se quejó de la escasa colaboración de la administración regional , involucró a la Junta de Andalucía en la responsabilidad de hacer de Málaga una ciudad más segura ante los grandes episodios de lluvia.

Así, apeló a la «solidaridad regional e institucional» aludiendo a las especifidades orográficas de Málaga. «Pocas ciudades tienen la configuración, la problemática y la complejidad de Málaga», argumentó, recordando que otras ciudades ya han resuelto este asunto.

Y no tardó en hacer efectiva su exigencia. En una breve conversación con la presidenta autonómica, Susana Díaz, que se encontraba en Málaga para recibir al jefe del Gobierno español y al presidente francés con motivo de la cumbre entre ambos países, le planteó dicha necesidad.

El regidor le indicó incluso a la administración andaluza de dónde sacar el dinero para colaborar en el plan de defensa de la ciudad : del polémico canon de mejora de infraestructuras hidráulicas que recauda la Junta en el recibo del agua. «Con la mitad de lo que se cobra por eso podríamos tener crédito para emprender estas actuaciones», afirmó. Aunque no existen datos provincializados, se estima que en Málaga la recaudación autonómica por este concepto podría estar en seis millones de euros.

Las primeras valoraciones de daños que ha realizado el Consorcio de Compensación de Seguros se cifran en unos nueve millones de euros . Este organismo estima que las peticiones de indemnización por siniestros relacionados con la inundación llegarán a las 3.000. Alrededor de 300 vehículos han sido afectados por las avenidas pero también hay numerosos daños en viviendas, aparcamientos y otro tipo de edificios.

Finalmente, fueron cinco las familias de la urbanización del Cerrado de Calderón —la más afectada— que hubieron de ser desalojadas por el riesgo para sus viviendas . En cuanto al gran socavón de este núcleo que se tragó tres vehículos, el Consistorio tramitará de urgencia su reparación.