Ley de Bienestar Animal: ¿Cuál es el curso que debes hacer si quieres tener perro en 2023?

La negativa y las críticas por parte de los veterinarios -las cuales mantienen-, así como la insistencia para que los perros de caza no entren en esta Ley de Bienestar Animal -como finalmente será- ha impedido que este proyecto se sacara antes de Navidad. Sin embargo, ya en 2023, año de elecciones, encara su recta final cuando aún se dirimen algunos detalles con respecto a cómo se llevarán a la práctica sus artículos.

Cabe recordar que esta Ley de Bienestar Animal pudo salir adelante en el Congreso de los Diputados después de que los integrantes de Unidas Podemos, socios de Gobierno del PSOE, cedieran ante las modificaciones que planteaban los socialistas. Debiendo continuar su tramitación en el Senado, aún se desconoce la entrada en vigor de este proyecto. Una vez transcurrida todo esto, será cuando se conozca de manera definitiva cuándo se pone en marcha de manera definitiva esta nueva norma.

Eso sí, esta ley contempla una serie de apartados innegociables, tales como la búsqueda del «sacrificio cero», la prohibición de exhibir, exponer y comercializar con perros, gatos y hurones en tiendas de animales y entre particulares, la instauración de un 'listado positivo' de animales de compañía y otras muchas medidas destinadas al correcto cuidado de los animales. En estas entra un curso obligatorio para los dueños que quieran tener perro en 2023, del cual se conocen ya algunos aspectos.

Todo viene de la consideración que hace la ley 17/2021, que entró en vigor en enero de 2022, por la cual los animales dejan de estimados como «bienes inmuebles o cosas», pasando a ser reconocidos como «seres vivos dotados de sensibilidad» y también miembros de la familia. Por ello, con esta Ley de Bienestar Animal que aún debe entrar en vigor, se establece la realización de un curso previo para todos aquellos que quieran adoptar un perro. Aunque todavía se desconoce su temática, lo que se sabe al respecto es que tendría carácter obligatorio, que sería gratuito y que se llevaría a cabo de forma online. Además, se contempla la opción de que este cursillo, que terminaría con un pequeño test, se haga en consultas veterinarias.

Aún son muchas las cuestiones que existen al respecto, aunque el claro objetivo es el de preservar la integridad de las criaturas, así como el cuidado responsable y la regulación de su tenencia por parte de sus dueños. Es decir, con este curso se quiere corroborar que los perros están en buenas manos, además de tratar de evitar el abandono, el maltrato y el incivismo, entre otras malas conductas.

Así pues, lo que sí esta claro acerca de esta prueba es que será obligatoria, gratuita y online. Pocos detalles más han trascendido sobre esta medida, la cual va dirigida a «las personas titulares o responsables de los perros», según dicta el artículo 36 de este anteproyecto de ley. Tampoco se conoce en qué consistirá este «curso de formación acreditado», aunque se intuye que se tratará de una especie de valoración de los conocimientos básicos de crianza y de mantenimiento del animal, similares a las pruebas previas que ya realizan las protectoras para autorizar la adopción de animales. Del mismo modo, además del curso en sí, los dueños deben contar con un seguro de responsabilidad civil.

También se conoce, según especifica el borrador, que esta formación tendrá una validez indefinida, en caso de superarse. Además, se trata de una prueba de «horas», según Sergio García Torres, director general de Derechos de los Animales, enfocada a ciudadanos que no hayan tenido antes un animal de compañía. Por otra parte, aquellas personas que ya sean propietarias de un animal tendrán un plazo de dos años para acreditar su capacitación. Si no lo hacen, deberán hacer frente a una multa, al igual que harían aquellas personas que quieran adoptar un perro en 2023 y estén obligadas a realizar este curso.

Los únicos canes que quedan exentos de la obligatoriedad de realizar esta nueva prueba son los perros de caza, pastoreo y guarda del ganado, que pasarán a estar clasificados como «perros de manejo especial fuera de actividad específica».

La realización de este curso para dueños de perros va ligado también al cumplimiento de otra de las medidas clave de la Ley de Bienestar Animal. En lo relativo al mantenimiento de unas condiciones de vida dignas para las mascotas, este proyecto enfatiza en el tiempo que los perros pasan solos en la vivienda, cuando no están acompañados de su dueño. Más concretamente, la norma limita un tiempo máximo de 24 horas, garantizando así la supervisión y el cuidado de estas mascotas.

Por otra parte, no solo los humanos estarán sujetos a un curso si quieren adoptar un perro. También los propios animales deberán pasar una valoración individual de obediencia y comportamiento. Otra prueba de obligado cumplimiento, teniendo en cuenta que cuando entre en vigor la Ley de Bienestar Animal ya no habrá perros definidos como potencialmente peligrosos. Si los canes no superan este examen, los dueños deberán ponerles el bozal para salir a la calle, además de sujetarlos con una correa corta, hasta que superen una prueba tras pasar por las manos de un adiestrador.