A Luis Salvador se le agotan las opciones como alcalde de Granada

Desde el PSOE en el día de ayer se señalaron «posibles consecuencias jurídicas» para Huertas y Salvador ante las «negligencias punibles» que se pueden dar por la toma de decisiones de órganos que no son competentes. El nudo gordiano del actual debate en la política granadina está de hecho en la imposibilidad legal de convocar una Junta de Gobierno Local al no llegar al mínimo de tres concejales necesarios para ello. Salvador sólo puede gobernar por decreto y la ralentización se da por hecha. La actividad de un Ayuntamiento como Granada, aunque amparado por sus funcionarios, es una gestión inviable para sólo dos personas. El todavía alcalde hace días que admite la situación y ayer planteó valorar «todo tipo de fórmulas» para solventar una crisis que, según sus propias palabras, «no se puede prolongar permanentemente». Fruto de ello, sus grandes apoyos, la dirección regional y nacional de Ciudadanos, empiezan a tener distinta música.

Mientras el portavoz naranja en el Congreso de los Diputados, Edmundo Bal insiste desde Madrid en la reincorporación de los concejales del PP, Luis Salvador hoy se dejará ver en Huétor Vega junto al vicepresidente de la Junta y coordinador regional de Ciudadanos, Juan Marín y el responsable del área de Municipalismo de la Ejecutiva Nacional de Ciudadanos, Fernando Giner, en un acto con afiliados. El partido naranja está dando tiempo a Luis Salvador para que medite la situación en la que se encuentra y busque una salida digna al espectáculo que está dando el Ayuntamiento de Granada.

El propio alcalde reincidió ayer en las palabras del líder de Ciudadanos en Andalucía en estos días, al contemplar «otros escenarios» para referirse a su futuro en lo que respecta al bastón de mando, acotado ya en «semanas». Con todo, las negociaciones se dan por sentadas desde todos los flancos, a izquierda y derecha, ya sea para una posible moción de censura cada vez más lejana o para el más que probable paso al lado de Salvador pactado con Marín, por lo que los acontecimientos podrían precipitarse en los próximos días.

Lo que parece seguro es que la posibilidad abierta por Vox de la disolución del Ayuntamiento y, por tanto, del adelanto de elecciones, no llegará a buen puerto. En su comparecencia de ayer, en la que estuvo presente Macarena Olona, diputada nacional del partido por Granada, así como el portavoz municipal Onofre Miralles y el portavoz andaluz Manuel Gavira , se anunció la tramitación de cinco iniciativas para que el parlamento autonómico solicite esta medida al Gobierno de España. Esta «vía legal», tal y como la denominó Olona, está amparada en el artículo 61 de la Ley de Bases de Régimen Local, y sería una medida del todo extraordinaria que sólo tiene como antecedente el caso de Marbella tras la Operación Malaya.

El caso granadino, muy diferente al que tuvo la localidad de la Costa del Sol en 2006, no se solventará por esa vía. Desde el PP confirman que no es «la fórmula adecuada» , que esta está preparada para casos «muy extremos» y que se deben plantear otras fórmulas «manera inmediata para mantener el acuerdo de coalición».