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Tribuna Libre

La gran redada contra los gitanos de Córdoba

«Vivían en las inmediaciones de Córdoba y de sus murallas, generalmente en aquel histórico Campo de la Verdad y en la ribera, criando ganado equino...»

Mirador de Osario Romano, en el Campo de la Verdad Rafael Carmona

Manuel Ramos Gil

Nada es más consustancial al ser gitano que gozar de plena libertad de movimientos, algo intrínseco a la cultura nómada de este pueblo que entró en la Península en el siglo XIV favorecido por los monarcas de entonces. Sin embargo, pronto los mismos reyes se ... dieron cuenta de que no hacían carrera de ellos, que no conseguían someterlos a las normas de convivencia impuestas en las Partidas. Por ello, los Reyes Católicos dictan una pragmática sanción en 1499 en la que establecen una pena de cien azotes para los gitanos que no tuvieran residencia fija y oficio conocid o; si reincidían, se le cortarían las dos orejas. Pero ni por esas. El pueblo gitano seguía empeñado en mantener su libertad, cultura, lengua «caló» y sus llamativos vestidos y los abalorios de su cuerpo.

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