El empresario Pedro Fernández-Salvador compra la emblemática finca de La Loma en Hornachuelos

El objetivo de Fernández-Salvador es convertir a La Loma en un «referente» en la producción de corcho y el negocio del cerdo ibérico . De hecho, la finca, en el corazón del parque natural, cuenta con una capacidad productiva de 21.000 quintales de corcho de alta calidad (un quintal castellano equivale a 46 kilogramos ), lo que supone, según detalló a ABC el propio empresario, «el 1,1% de la producción española». El volumen medio anual estimado por la Junta de Andalucía para Córdoba alcanza las 2.500 toneladas.

A ello se suma la carga ganadera de la explotación, que puede abarcar un top de 700 cerdos ibéricos en un marco inmejorable por las excelentes condiciones que presenta este enclave de Sierra Morena, agregó el nuevo propietario, que se suma a las «posibilidades cinegéticas». Pedro Fernández-Salvador participa en estos momentos en varios proyectos hoteleros en París , Milán , Colonia , Berlín y Bruselas. En Córdoba capital es el propietario del hotel de cuatro estrellas Casas de la Judería .

La finca La Loma perteneció en la primera parte del siglo XX a la familia Carrizosa Naranjo. Luego, en el año 1970 fue adquirida por Manuel Rodríguez Torres , quien edificó, bajo la dirección de Andrés Parladé, una nueva residencia. Antes de que estallara la crisis económica, esta finca fue adquirida por el presidente de Colonial Luis Portillo -compró otras dos en Hornachuelos muy próximas de alto valor cinegético: Alta Baja y El Gitano-. La quiebra del empresario dejó en manos de Bankinter la propiedad.