Ocho décadas del Señor de Humildad y Paciencia en Córdoba

Como padrinos de la ceremonia actuaron Bartolomé Torrico Martos y su esposa, Antonia Torrico de Torrico, como detalla la cofradía en la descripción de su titular.

La advocación proviene del Señor de las Penitas de San Lorenzo, que es la iconografía auténtica de Humildad y Paciencia. El Señor de Humildad y Paciencia, durante su historia, ha tenido tres misterios y tres pasos. Los dos primeros misterios y pasos, de su autor, Juan Martínez Cerrillo.

El actual, ya definitivo, se estrenó en 1997: el misterio de Antonio Bernal y el paso terminado de talla en los talleres Santa Águeda. El dorado fue concluyéndose los años siguientes.

Bajo una idea primitiva marcada por los fundadores de la hermandad, se encuentra la explicación a una advocación de mucha devoción: Humildad y Paciencia.

Ante la imposibilidad de adquirir en propiedad la imagen del Señor existente en la hoy desaparecida ermita de San Juan de Letrán, la hermandad encargó en 1942 a Juan Martínez Cerrillo la nueva imagen.

Si bien, Martínez Cerrillo resolvió de manera diferente la iconografía de Humildad y Paciencia porque aparece de pie, con los brazos abiertos, permitiendo el despojo de sus vestiduras y aceptando la cruel sentencia de Poncio Pilatos.

En San Juan de Letrán se encontraba una imagen de Cristo bajo tal advocación, que aparecía sentado en una peña en actitud orante, como tantas otras imágenes de la misma advocación.

Tiene su origen en la Edad Media, en los grabados de Alberto Durero. Iconográficamente aparece el Señor sentado sobre una roca, mientras espera el momento de la crucifixión y ruega al Padre perdón para los ejecutores de su sentencia.

La imagen de Humildad y Paciencia de San Juan de Letrán se encuentra actualmente en la parroquia de San Lorenzo. La que se venera en la iglesia de Capuchinos es de talla completa, aparece de pie inclinado hacia adelante, con el brazo derecho adelantado.

La mano queda a la altura de la cintura, y el brazo izquierdo ligeramente hacia atrás con la mano entreabierta. La cabeza está un poco girada hacia la derecha y sus ojos entreabiertos, en actitud de agotamiento y dolor físico. Fue restaurado en 1989 por alumnos del profesor Rafael Valverde Luján.

El año pasado fue María Santísima de la Paz y Esperanza la que acaparó absolutamente todas las miradas, con el 83 aniversario de su bendición el 8 de septiembre y la coronación canónica del 15 de octubre en la Catedral.

Precisamente este miércoles, quince residentes de la comunidad 'Rescatados de María' de Hornachuelos, obra social de la coronación, visitaron a la Santísima Virgen en el día de su onomástica para rezar ante Ella y ofrendarle un pañuelo.