La ruta imprescindible por las esculturas de Belmonte en Córdoba

Este creador ha llevado sus obras desde Córdoba a Madrid, Barcelona, Grecia, Bélgica, Italia, Japón, Singapur… Precisamente, en la capital cordobesa cuenta con un gran número de esculturas expuestas en la vía pública. Estas son las más descatadas:

En el interior de la Mezquita-Catedral se encuentra el Mausoleo dedicado al obispo José Antonio Infantes Florido, que Belmonte esculpió en 1994. Esta obra en la tumba del religioso, que fue la última personalidad enterrada en el interior de la sala de oración, destaca por los relieves con los que cuenta y que se refieren a a la Anunciación, el Nacimiento, la Crucifixión y la Resurrección de Jesucristo.

En el año 2003, Belmonte inaugura una de sus obras más conocidas, el grupo escultórico en homenaje a la mujer cordobesa, realizado en bronce.

Se trata de una fuente en la que aparecen representadas dos mujeres con el recogido del típico moño cordobés que portan sus respectivos cantaros de agua. Se encuentra ubicada en la plaza de Colón, frente al Palacio de la Merced.

Entre las creaciones más conocidas del afamado escultor se encuentran las tres dedicadas a los Patios de Córdoba, que se ubican en distintos emplazamientos.

La primera se colocó en 2014 en la Puerta del Rincón, un par de años tras la declaración de Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Es la que se conoce popularmente como 'La Regaora' y está dedicada a los cuidadores de los patios.

En 2015 se instaló la segunda obra esta trilogia, 'El abuelo y el niño', en la que se reprenta el paso generacional de la tradición de los patios, ya que le está entregando una maceta al nieto que la recibe subido a una escalera. Se encuentra en el barrio de San Basilio, en la calle Martín de Roa.

La última se puede contemplar desde el pasado julio de 2022 en la plaza del poeta Juan Bernier. Se llama 'El pozo de las flores', y representa, en palabras del propio Belmonte, «a las verdaderas protagonistas, que son las madres y las abuelas, que transmiten la forma de cuidar los patios, y eso se ve en el cruce de miradas entre una y otra».

Esta escultura se inauguró en abril de 2004 y se encuentra en uno de los laterales de la iglesia de San Pedro. Presenta tres figuras en bronce: el escultor sentado pensativo y en la zona superior, Cristo agonizando asistido por su madre en bajorrelieve.

Para el rostro y figura del escultor Juan de Mesa, Belmonte tomó los rasgos de un costalero de la cofradía de la Virgen de las Angustias (Carlos Puya).

El autor Belmonte explicó en su día que en su escultura plasma a Juan de Mesa pensativo y la mano del Cristo de las Angustias le sugiere la creación de la obra: 'Virgen de las Angustias'.

No podía faltarle a este escultor cordobés una obra dedicada al arcángel de la ciudad, San Rafael. El monumento se encuentra incluido en la estructura del estadio de fútbol Nuevo Arcángel. Está en la entrada a la zona de Tribuna. La imagen alada del custodio de la ciudad aparece sobre una plataforma que emula a una nube.

Está representada con el bastón y una cartela con el Juramento al Padre Roelas. Este detalle recuerda cuando el 7 de mayo de 1578 se aparece el Arcángel, que juró que era «el guara y custodio de la

En el Puente de Andalucía, que une el polígono de la Torrecilla con el Hospital Reina Sofía, también hay dos bajorrelieves de Belmonte realizadas en bronce y que están colocadas a ambos lados del pilar central.

Cada uno de estos dos bajorrelieves representan el escudo de Andalucía y cada uno mide 2,60 metros por un metro.

En marzo de 2015 se instaló en el Paseo de la Victoria, frente a la calle López de Hoces, el busto del párroco Antonio Gómez Aguilar, cuyo trabajo educativo fue el germen de la Obra Pía de la Santísima Trinidad, que surge a finales de los años 80 como consecuencia de la magnitud de las obras sociales que desarrollaba el párroco.

Esta escultura de Belmonte ha sido noticia en varias ocasiones durante los últimos años por haber sido objeto de actos vandálicos como pintadas.