El pueblo de Córdoba que tiene su propia versión de la casa de la Sirenita

La Casa de las Conchas no es un monumento histórico ni sigue las líneas arquitectónicas de un estilo reconocido. Sin embargo, su decoración minuciosa y detallada la ha convertido en uno de los lugares más visitados y fotografiados de Montoro.

Su creador, Francisco del Río Cuenca, dedicó más de medio siglo a recolectar e insertar cada una de estas conchas, traídas desde distintos puntos de la geografía española. Su perseverancia y amor por esta obra han hecho que la vivienda sea hoy en día un auténtico símbolo del pueblo.

Al entrar en la casa, nos encontraremos con columnas cubiertas de piedras del río Guadalquivir y macetas decoradas con los residuos que desprendían los antiguos trenes de carbón. En el techo, los detalles no dejan de sorprender: ramos de flores hechos con conchas, espejos estratégicamente colocados y otras figuras que reflejan la creatividad de su autor.

En el exterior, los patios típicos andaluces han sido revestidos con frisos de conchas, creando un efecto visual único. Cada rincón de esta vivienda es un testimonio del esfuerzo y dedicación que Francisco del Río puso en su construcción.

Más allá de su peculiar estética, la Casa de las Conchas es también un símbolo del contexto socioeconómico de la posguerra en España. Durante los años 60 y 70, muchos montoreños emigraron a la costa catalana y valenciana en busca de trabajo. Como recuerdo de su estancia en el litoral, traían bolsas llenas de conchas para que Francisco del Río siguiera decorando su casa.

Esta tradición ha convertido la vivienda en un legado vivo, que aún hoy sigue asombrando a quienes la visitan. Aunque no se trata de un palacio o una catedral, la Casa de las Conchas es un testimonio del ingenio y la pasión de un vecino de Montoro que convirtió su hogar en una auténtica obra de arte.

Si quieres descubrir esta joya única en España, puedes visitarla en la calle Criado, 17, Montoro (Córdoba). Las visitas tienen que ser concertadas llamando al 957 160 621 y el precio es de un euro por persona.