Magtel entra en el sector de la desalación de agua en la Costa del Sol

El director de Hidráulica y Medio Ambiente del grupo empresarial cordobés, Arturo Buenaventura, informó a ABC que la compañía está desarrollando actualmente varios proyectos de desalación de agua del mar con una proyección a medio y largo plazo. Este directivo destacó uno de ellos se encuentra impulsado por las administraciones en la comarca de La Axarquía malagueña con el objetivo de poner en marcha una planta desaladora con capacidad para bombear 40 hectómetros cúbicos al año.

«Esta zona es bien conocida por el cultivo del aguacate y del mango, pero su situación actual es dramática por la falta de agua, lo que ha provocado reducciones de cosechas de hasta un 65 por ciento en 2022 y una estimación de que este año descenderá en torno a un 80 por ciento», explicó.

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Magtel compite con otras dos firmas del sector (Acciona y la alianza formada por Trops, Grupo Cobra y la Universidad de Málaga) por hacerse cargo de este proyecto, una decisión que la Junta de Andalucía no quiere tardar mucho en tomar para que este equipo esté en funcionamiento lo antes posible, «complementando, de este modo, otras medidas que ya se están aplicando como es el caso de mejoras en las infraestructuras y la disponibilidad de aguas regeneradas», según aseveró Buenaventura.

En su opinión, la propuesta de la compañía presidida por Mario López Magdaleno es «muy madura, viable y optimizada gracias al trabajo realizado en los últimos tres años con el apoyo de las comunidades de regantes de la zona, el Ayuntamiento de Vélez-Málaga y los productores agrícolas».

La entrada de Magtel en este sector es fruto de la situación climática actual. Buenaventura recordó que «llevamos cinco años continuados de sequía en España con un importante déficit pluviométrico, lo que ha originado que disminución permanente de las aportaciones a los embalses, cuya capacidad se ha ido reduciendo, junto a la del resto de acuíferos, llegando a afectar todo ello a la garantía de la disponibilidad de recursos hídricos tanto para riego como el abastecimiento a la ciudadanía».

Como respuesta a este escenario Magtel lleva trabajando desde 2020 en el desarrollo de posibles soluciones para generar recursos hídricos adicionales a partir de la regeneración de aguas residuales para su reutilización y a través de la desalación de agua del mar.

Frente a las dudas que pueden surgir entre la población en cuanto a la calidad del agua de origen salino tratada por estos equipos, este directivo aseguró que su potabilidad para el consumo humano es total, así como para que los regantes la puedan utilizar en sus explotaciones.

En este sentido, apuntó que «el sector agroalimentario y el turismo son actividades estratégicas de la economía andaluza, por lo que es urgente adoptar las medidas necesarias mitigar y adaptarse a los efectos del cambio climático».

Eso sí, desde el grupo cordobés lamentaron la lentitud administrativa de estos proyectos. «Es necesario agilizar su tramitación, así como hacer un mayor esfuerzo por parte de las administraciones a la hora de hacer la planificación hidrológica con el fin de anticiparse lo máximo posible», concluyó Buenaventura.