Fuente de la Salud: el nuevo oasis residencial de Córdoba entre contrastes

Curiosamente los primeros habitantes de la zona entre las calles Fuente de la Salud, Virgen de las Angustias y Sor Ángela de la Cruz, no fueron los vecinos de los modernos edificios, aún no alzados, sino precisamente las familias del Valdeolleros antiguo. Y es que cuando todo eran solares, grúas y obreros, ya estaban instalados los parques infantiles, por lo que los padres venían aquí con sus hijos a pesar del barullo.

Es el caso de dos madres, Sandra Santiago y Laura de la Fuente: «En Santa Rosa no hay parques, y aquí, cuando todo eran solares, ya habían hecho los parques», explica de la Fuente. «Está más allá el Parque de la Asomadilla, pero para llegar al parque infantil tienes que subir», apunta Santiago. «Y además aprovechas el Deza para hacer la compra», manifiestan ambas.

Es este supermercado de Fuente de la Salud, abierto en la primavera del 2023, un trasiego constante de clientes. Por la disposición de los edificios y su carácter, con comunidad alrededor, en la zona de Tribeka apenas hay lugar para los locales, y por tanto para los negocios, salvo los que abran en edificios colindantes también de reciente construcción. Así que, de momento, está el Deza y la farmacia de la licenciada Natalia de Alcaraz Montijano. «Empezamos el 24 de julio de 2023», recuerda uno de los encargados de la botica, Fernando Lachica. «Cada vez hay más gente en el barrio, a la que hay que sumar los clientes que vienen de la zona antigua de Valdeolleros».

Los espectadores del conocido programa 'El encantador de perros', protagonizado por César Millán, están acostumbrados a ver a este adiestrador a bordo de sus patines mientras se desliza tirado por uno o varios animales. Es el caso de Begoña de los Llanos Ortega Rayo, que se desplaza como indica su último apellido a modo de particular trineo tirado por sus perros Apolo y Sultana. Vive en uno de los edificios más sugerentes por su aspecto y dedicados al alquiler, por el que paga 800 euros en un piso de dos habitaciones. Estos inmuebles llaman la atención por su decoración vegetal. «Soy de Sevilla y he vivido en muchos lugares de España, escogí esta zona porque es un lugar muy tranquilo, sin delincuencia y donde puedes salir de noche sola con o sin perros». Dice salir con ellos en patines para que los animales se ejerciten más, generando esa estampa poco habitual en Córdoba pero que quizá se ponga de moda.

Varios vecinos comentan a ABC que en este edificio dedicado al alquiler hay inquilinos ilustres, en concreto dos personas habituales en los programas del corazón en los últimos lustros. Se trata de Julián Contreras y su padre, del mismo nombre, hijo y exmarido respectivamente de la malograda Carmina Ordoñez. Los vecinos destacan su amabilidad y llaneza, pues se les puede ver como uno más paseando al perro, esta vez sin patines.

En las zonas verdes comunes entre edificios, un padre juega con un balón de voleibol con su hija. Son Alberto y Lucía Puertas. «Nos mudamos hace un año, me atrajo que fuese una zona nueva y también la nostalgia, porque yo estudié en el Instituto Ángel de Saavedra». La familia pensó al principio en mudarse a la nueva de la Arruzafa, pero vieron el lugar demasiado alejado de todo.

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Esta cercanía es precisamente uno de los puntos fuertes que destacan muchas de las personas que se han ido mudando a un barrio en el que todavía se ven un notable número de pisos vacíos que se irán llenando poco a poco. «Vivíamos en Ciudad Jardín, pero escogimos esta zona por su calidad, tranquilidad y porque está cerca del centro», declara Juan José Bersabé, que pasea con su pequeño perro Chucky. Él fue uno de los primeros habitantes del barrio, pues se trasladó el 1 de marzo de 2022. Denuncia, eso sí, algún problema con gamberros que se trasladan para reunirse en las calles, a modo de botellón; y que muchas de las personas que aparcan en el descampado cerca del súper, toman al salir y hacia el supermercado una dirección prohibida, con el peligro que acarrea para los viandantes. «En ese aspecto echo en falta que la policía se pase un poco más».

Víctor González y María José Rodríguez son pareja y se han mudado desde Mirabueno, aunque por motivos de trabajo se han ido trasladando hasta una docena de veces. Se mudaron el pasado mes de diciembre. Querían cambiar su última casa por un piso, para dejar atrás, por ejemplo, las escaleras. «Estamos bastante contentos, aunque ahora tengamos menos espacio», dice González. «Desde arriba podemos ver hasta el castillo de Almodóvar, eso sí, en chiquitito», bromea ella en la conversación.

Jesús Velasco también lleva viviendo muy poquito por la zona, tan sólo un año. Este cordobés, por motivos de trabajo, venía de Pamplona, y escogió el lugar por la piscina. «Lo que más me gusta del barrio es que es fresco, hace bastante aire». Y, en efecto, es una zona en la que la brisa corre por todas partes. Agustín Jiménez llega a su portal con su hija Julia. Vivían en el Zumbacón y querían mudarse a un piso más grande, alto y con terraza. «Lo mejor del barrio son las zonas comunes, su buena comunicación y que tengamos el Deza, aunque esperamos que se urbanice toda la parte que va a la Asomadilla, que está algo destartalada». Aún con varios descampados donde se ha de edificar y una zona prevista para jardines que linda con Chinales, este barrio todavía se puede considerar en construcción. Pero la vida ya llena sus calles.

Según un reciente estudio de la consultora Activum Real State, Fuente de la Salud cuenta actualmente con 1.090 viviendas en desarrollo, lo que convierte a esta zona en la principal para el desarrollo inmobiliario y de inversión en Córdoba, puesto que más de la mitad del total de nuevas viviendas en la ciudad. Y todo ello en una serie de manzanas muy acotadas, es decir, que semejante importancia en el mundo de la costrucción se ciñe, en comparación, a un tamaño muy pequeño.

Kronos, Neinor Homes, Efico Homes, Impact Homes, Grupo Insur, Vía Célere o Inmoclever son las empresas que han participado en la puesta en marcha de un barrio al que todavía le quedan varios edificios por construir. Según este estudio, Un 70% de compradores optan por viviendas de tres dormitorios, seguido por un 20% que prefieren viviendas de dos dormitorios, y un 10% que buscan viviendas de cuatro dormitorios.

En cuanto a los precios medios, alcanzan los 163.350 euros para pisos de un dormitorio, 203.740 para los de dos, 256.790 para los de tres dormitorios y 328.036 para los de cuatro. El tamaño medio de los pisos es de 85 metros cuadrados.