Guía de belenes de Córdoba para esta Navidad

El trabajo minucioso de las manos de los belenistas se muestra en cada rincón de los 28 nacimientos que participan en la XLI edición del Concurso de Belenes Fundación Cajasur este año -tres más que en 2021- y que comenzaron el pasado viernes a abrir sus puertas.

La Asociación Cultural Belenística de Córdoba con nueva directiva ha logrado aunar furezas de más de un centenar de belenistas y aficionados en el último año, en un intento por profesionalizar este arte religioso con 'master class' y formación a cargo de los mejores en cada materia.

El secretario de esta asociación belenística, Manuel López, ha explicado a ABC que este año se han retomado cursos y formación que quedaron suspendidos por la pandemia y se han incorporado nuevos socios y clases especializadas a cargo de los mejores en esta tradición. «Hay mucho interés por mejorar; hemos tenido formaciones desde iluminaciones de Montilla a Lola Templado -que ha impartido cursos sobre cómo hacer los olivos en un Belén- o de paisajismo; además de clases de perspectiva; de envejecimiento de madera; o de cómo hacer palmeras, azulejos y tejas», explica López.

Esta asociación cultural está detrás de dar forma a cuatro Belenes emblemáticos de la ciudad como son -fuera de concurso- la Fundación Cajasol; Caja Rural Diputación y Ayuntamiento de Córdoba, con el trabajo de unas 20 o 25 personas.

¿Qué lugar ocupa Córdoba en la tradición del Belén? Desde la Asociación asegura López que «visualmente, los mejores Belenistas están en Cádiz, Sevilla -con ciudades como Écija- que no es comparable con Córdoba» pero esta ciudad no está fuera de liga.

«Hemos luchado para que huiera muchos Belenes fuera de concurso y hemos logrado desde la asociación que haya más de 40 en la Ruta de Belenes en Córdoba, para eso hemos creado una página web con mapa interactivo donde obtener información«, añade.

En la asociación son ya más de 100 socios, y hace falta gente más joven de 40 o 45 años; es necesario un relevo generacional, poco a poco irán entrando para que no se pierda esta tradición, cuenta el secretario de los belenistas.

Para la Asociación de Belenistas, todas las instalaciones de este tipo, por muy humildes que sean son bienvenidas porque «intentamos dar visibilidad a todas las formas. En Caja Rural con unas figuras maraviollosas y en el Hospital Reina Sofía, en el ala de Oncología Pediátrica pues un Belén de resina con muñecos gordotes; todos son válidos, y sobre todo, hay que darles visibilidad como al Nacimiento popular de corcho y musgo, es la forma de fomentar el Belenismo«.

Este pasado lunes abría al público uno de los Belenes más emblematicos de Córdoba, el de Cajasur, fuera de concurso. Uno de los artífices de este escaparate de la Navidad es el belenista José Luis Pulido, con numerosos premios en su haber que trabaja mano a mano con Fran Mérida.

Pulido cuenta a ABC que como belenista participa en tres Belenes; dos dentro del concurso y el que no lo es, que es el de Cajasur. «Mérdia y yo llevamos una tradición de una década. Este Belén en Ronda de Tejares es de figuras a palillo de 40 centímetros, obra del imaginero Juan Carlos Arango. Este año, explica este belenista, la muralla que está en Cajasur integrada con más de veinte siglos de historia será la protagonista del nacimiento. Un código QR explica la historia de esta Córdoba intramuros como un guiño a esa época dentro de este Belén hebreo.

La labor de un Belén como este de Cajasur requiere el trabajo de todo un año. «Sólo con decirle que las figuras a palillo son de 40 centímetros, por lo que si quieres levantar una casa al lado como mínimo tiene que ser de un 1,60 centímetros. A esto se une la dificultad que tiene plantear un Belén en una zona con 7 metros de largo pero sólo 80 centímetros de ancho; es muy complicado«, cuenta este artista belenístico.

El valor de los premios dentro del Concurso de Belenes de Cajasur ha caído en los últimos años, pasando de cifas de 2.000 euros para un tercer premio a apenas unos 200 en vales de canje para establecimientos especializados. De este modo, cuentan algunos belenistas a ABC que «nadie participa en el concurso haciendo un Belén por dinero; es algo que te tiene que apasionar».

Para belenistas como Jean Pierre Cochard autor del Belén de la Asociación Familiar Alcorce en la Judería lo más importante al hablar de belenismo es «todo lo que significa; lo que está detras de cada escena, de cada figura«.

Este año, el Belén de Alcorce, uno de los que entra a concurso incluye muchos símbolos para que el espectador pueda imaginar lo que ocurriría 33 años después. Por ejemplo, hemos puesto los Sacramentos de Iniciacioón - como el agua para el Bautismo o el olivo en la Confirmación; los pescadores como los primeros apóstoles; los pastores de rebaño o la figura de la samaritana- entre otros.

«Una de estas señales del Belén de Alcorce está situada en forma de grieta detrás de la casa de María en el pasaje de la Anunciación que supone la separación entre el Antiguo Testamento y Nuevo Testamento«, explica Cochard.

Los Belenes, según este belenista francés afincado en Córdoba, «hay que estar abiertos a todas las clases de Nacimiento; el nuestro es tradicional catequético pero hay otros como los Belenes 'Napolitanos' como el del Palacio de Viana o los diferentes estilos que hay en la Diputación o el Ayuntamiento que son fantásticos. Cuanto más Belenes, mejor; lo importante es la diversidad; sería terrible tener una línea única«, concluye Cochard.