Unas 400 personas participan en la marcha por el agua en el Norte de Córdoba

Los casi 80.000 habitantes de las localidades afectadas tienen restringido desde el pasado 17 de abril el consumo del agua potable por la presencia de especies de cianobacterias potencialmente tóxicas para la salud, según la referencia de la Consejería de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía.

La lluvia no ha impedido que la concentración sea todo un éxito. Los participantes (incluidos niños) han plantado cruces en el suelo del pantano, que está completamente seco, para simbolizar su «muerte».

El número de asistentes se ha multiplicado hasta llegar a los 700, según la organización de la marcha, durante la lectura de un manifiesto, ya en la plaza principal de la localidad de Peñarroya. Los asitentes, además, han podido disfrutar de una jornada de convivencia y concienciación, con juegos para los más pequeños y una barra con bebida para los asistentes, cuyos fondos irán destinados a seguir impulsando las iniciativas encabezadas por el colectivo convocante.

Según ha explicado a este periódico la vicepresidenta de Unidos por el Agua, Daría Romero, «es necesario que todas las administraciones implicadas se unan de una vez por todas y nos den una solución, ya que todas son responsables de esta lamentable situación en la que nos encontramos».

En este sentido, Romero ha dejado claro que «no queremos chapuzas, sino posibilidades de sobrevivir. La falta de agua la estamos padeciendo no sólo los vecinos, sino también los ganaderos, la industria, los comercios...No de puede permitir que esto se alargue más».

Entre las reivindicaciones, la vicepresidenta ha destacado como prioritario «potabilizar de una vez el agua de La Colada, realizar el trasvase desde Puente Nuevo a Sierra Boyera, así como llevar a cabo el trasvase desde el embalse de la Serena, ubicado en la provincia de Badajoz a La Colada».

Romero ha apuntado que las acciones reivindicativas van a seguir adelante: «No vamos a permitir que nos toreen más. Lamentablemente, los vecinos del norte de la provincia estamos acostumbrados a tener que salir a la calle cada vez que hay algún problema;y, en este caso, estamos reclamando un derecho básico. Nos tuvimos que plantar contra el cementerio nuclear, y manifestarnos por los hospitales y también para que pare el tren en Los Pedroches. Esto ha sido ya la gota que ha colmado el vaso».