Córdoba en mayo

Los resultados de las elecciones autonómicas en Córdoba han llevado ya a algunos a sacar conclusiones que nos parecen precipitadas porque pese a que estamos a menos de dos meses de la cita electoral nadie puede aventurar lo que pueden deparar las urnas en Córdoba el próximo 24 de mayo. La euforia de los socialistas no tenía muchos motivos para serlo en la ciudad de Córdoba. Es cierto que, a diferencia de lo ocurrido en el 2012, en que el PP los sobrepasó en las urnas de una forma espectacular sacándole casi 35.000 votos de ventaja, la distancia electoral ha disminuido sustancialmente. Pero sigue siendo importante. El PP ha resistido bien en sus feudos capitalinos, en medio del batazo electoral sufrido. El éxito de los socialistas en Córdoba y su provincia es relativo y se ha debido sobre todo a la pérdida de votos de los populares. En realidad, el PSOE ha perdido apoyo electoral en comparación con las anteriores elecciones autonómicas, simplemente ha perdido menos que el PP y le ha beneficiado la ley D´hont. Para IU los resultados han sido un desastre sin paliativos, perdiendo más de un tercio de sus electores.

Esos son los resultados, pero lo son de unas elecciones muy diferentes a las que tenemos por delante, con un fuerte componente personal y buena parte de los electores utiliza criterios diferentes a la hora de votar. Prueba de ello la tenemos en UCOR, que no ha concurrido a las elecciones autonómicas, pero volverá a presentarse a las municipales. ¿El apoyo que recibió en 2011 era un anticipo de lo que ha dado lugar a Podemos y Ciudadanos....?

Me refiero a si UCOR recogió el rechazo que ya había a las siglas tradicionales. ¿Repetirá el 20% de los sufragios que obtuvo en el 2011? Parece difícil porque ahora el abanico se abre mucho con Podemos y Ciudadanos. Pero Rafael Gómez estará en la parrilla de salida. No sabemos qué listas presentarán quienes han sido la novedad de las elecciones autonómicas; ahora bien, los 26.000 votos Podemos y los 19.000 de Ciudadanos en la ciudad de Córdoba parecen augurar su presencia en Capitulares.

Todo apunta a que la Corporación que salga de las urnas será más compleja y también que la necesidad del PP de obtener mayoría absoluta para hacerse con la Alcaldía, que era condición «sine qua non» de otras épocas —debido a los pactos IU-PSOE—, puede no serlo ahora. Pero en el PP tienen que ser cuidadosos y no hacer afirmaciones como las de Antonio Sanz, delegado del gobierno en Andalucía, en la pasada campaña electoral.