Un grupo de traficantes de tabaco apedrea a dos agentes de Aduanas tras quedarse varados en Gibraltar durante una persecución

En un momento, entre los quiebros, las salidas y las evasivas, desde el patrullero se decidió botar una lancha auxiliar. En ella iban dos agentes de Aduanas dispuestos a seguir a la embarcación de los contrabandistas. En medio de la persecución frente a la playa la lancha de Aduanas se averió. Un fallo en los motores las dejó a merced de las corrientes marinas.

Los dos agentes estuvieron esperando hasta que la lancha quedó varada en la playa de Levante de Gibraltar. Según confirman a ABC fuentes de Vigilancia Aduanera, fue cuando tocaron tierra cuando comenzaron los problemas. En ese mismo lugar había un colla –un grupo de traficantes esperando para la carga o descarga de una embarcación–.

A este grupo numeroso de personas no le gustó la presencia de los dos agentes, así que comenzaron con insultos y a lanzarles piedras. Algunas de la piezas lanzadas eran de más de 20 centímetros. Las piedras impactaban en los agentes que se vieron obligados a reflotar la embarcación para poder huir.

Así, bajo la lluvia de pedradas, pidieron ayuda a las autoridades del Peñón para poder salir de allí. Fueron estas las que se interpusieron entre la colla y los agentes para darles tiempo para huir. Al final, pese a que no paraban de caer piedras, ambos volvieron al mar y remando se marcharon del lugar.

A remo y heridos, llegaron al patrullero del que habían salido en una embarcación auxiliar para la persecución. Cuando fueron evaluados por los servicios médicos, los dos agentes tienen contusiones, fracturas y cortes por la pedradas en varias partes del cuerpo, sobre todo en la cara. Según Vigilancia Aduanera, uno de ellos está a la espera de someterse a cirugía para sanar las lesiones provocadas.

Como consecuencia de la agresión, uno de los funcionarios resultó con el tabique nasal roto. El otro ha sido derivado a un Hospital en Cádiz para ser evaluado por especialistas, por las fracturas en varios huesos de la cara. Ambos han requerido puntos de sutura por varios cortes.