Santa Ana: Los buzos entrarán hoy en el barco

El cuarto día de rescate de las víctimas del «Santa Ana» fue difícil, pero se logró el objetivo: estabilizar el pecio

Santa Ana: Los buzos entrarán hoy en el barco citoula

E. MAYORDOMO/O. CUERVO/ N. PRIETO

14/03/2014
Actualizado a las 11:43h.

Otra jornada complicada para estabilizar el «Santa Ana», el pesquero hundido el pasado lunes en el Cabo Peñas, aunque esta vez, por fin, acabó con éxito. La niebla primero y la difícil posición en la que se encontraba el casco provocaron serias dificultades a ... los equipos de rescate, que sabían que si no conseguían poner el pecio a resguardo de las corrientes, los buzos no podrían entrar en él. La delicada operación pasaba por lograr arrastrar el barco a un fondo menos peligroso. A última hora se informó de que se había conseguido el objetivo de estabilizarlo y que, por tanto, hoy se entrará en la embarcación. La cuenta atrás ha comenzado.

El capitán de Grupo de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil, Carlos Martínez, y el director de Operaciones de Salvamento Marítimo, Joaquín Maceiras, explicaron anoche que los hombres del Instituto Armado intentarán entrar por la zona de los pasillos, en la proa, y al mismo tiempo buzos de Salvamento Marítimo realizarán un agujero en el casco, en la parte de popa, para buscar en otros lugares. En total, serán treinta las personas que participen en la operación.

«No nos metan prisa»

Martínez dijo que «mañana (por hoy) seguro que entramos, pero no sé cuando acabaremos». «No nos metan prisa», pidió. Está previsto que los buzos lleguen a Cabo Peñas a las nueve y media, aunque la preparación de las operaciones comenzará a las siete. Cuando entren por la proa los buzos deberán «limpiar» el interior del buque y llegarán hasta los camarotes, donde se espera que estén los cuerpos de los seis marineros desaparecidos. Para ello realizarán una inmersión a 25 metros, subirán a diez, donde se encuentra la entrada del barco, y volverán a bajar. Al mismo tiempo un equipo de Salvamento Marítimo hará un agujero por el que acceder a otras zonas en las que pudieran estar los cuerpos.

Los técnicos lograron estabilizar el barco moviéndolo con el remolcador «Alonso de Chaves», al quedar el pecio anclado en vertical sobre una grieta del fondo marino. La maniobra no fue sencilla. Se realizaron dos intentos. Por la mañana la operación tuvo que abortarse después de que se rompiera uno de los cables de arrastre que el equipo de búsqueda había logrado enganchar entre el casco y el «Alonso de Chaves». Por la tarde se utilizó una cadena más resistente, y después de varios tiros se consiguió la ansiada estabilización.

Como es lógico, a medida que pasan las horas la angustia aumenta, porque el único deseo de los familiares, tras aceptar el trágico desenlace, es recuperar los cuerpos cuanto antes para poder despedirse de sus seres queridos. De ahí que en algunos momentos hubiera voces críticas con el desarrollo de los trabajos. Quienes participan en la operación lo saben y hasta lo comprenden por la desesperación que viven esas personas. Por su parte, no se detendrán hasta rescatar los cadáveres de Manuel María Tajes (mecánico) y Lucas José Mayo Abeijón (marinero), ambos gallegos; el joven asturiano Marcos del Agua Chacón, alumno en prácticas; el contramaestre portugués Víctor José Farinhas Braga, y los indonesios Suherman (mecánico) y Wasito (marinero). Si todo sale bien, hoy todos podrán descansar.