El Parlament proclama el derecho de Cataluña a convocar una consulta

Se trata del primer paso de la hoja de ruta hacia el referéndum que pactaron CiU y ERC para dar estabilidad al Govern de la X legislatura. La consulta será, según el texto que ha salido adelante, "escrupulosamente democrática", "transparente", planteada con "diálogo con el Gobierno español, las instituciones europeas y el conjunto de la comunidad internacional". La consulta se llevará a cabo, además, haciendo servir "todos los marcos legales existentes".

La votación ha vuelto a poner en evidencia los problemas internos que padece el PSC. Aunque los socialistas, reunidos a última hora en la Cámara, han decidido esta mañana que votarían en contra de la resolución, al final, el sector crítico, el más catalanista, se ha salido de la disciplina del grupo y durante la votación cinco de ellos no han votado para evitar tener que apoyar el no acordado por el PSC. Los socialistas se enfrentan a una grave crisis interna.

Donde no ha habido sorpresas es en CiU, que ha vivido una noche muy larga, después de la crisis que se abrió ayer en el seno de la Federación a raíz de la resolución que la agrupación de Barcelona de Convergència aprobó el lunes contra el lider de Unió, Josep Antoni Duran Lleida. El cruce de recriminaciones fue ayer público entre ambos socios. Duran ha salido esta mañana al paso, ha pedido perdón por las declaraciones de su portavoz, Marta Llorens, que instó a CDC a preocuparse por el embargo de su sede. Oriol Pujol, por su parte, ha reconocido que la coalición ha tenido un "problema" y que cualquier replanteamiento que tenga que hacer la federación será para reforzarse.