Los españoles hacen acopio de efectivo: uno de cada tres guarda más dinero en casa tras el gran apagón

«Los acontecimientos recientes han reforzado el papel del efectivo como herramienta de protección frente a fallos tecnológicos. Tras el apagón del pasado abril, el 35% de los encuestados mantienen una mayor cantidad de efectivo en casa», recoge el informe. Asimismo, por grupos de edad, son los más jóvenes los que más han incrementado su tenencia de dinero físico para prevenir problemas como estos de no poder pagar las compras cuando no hay electricidad. El 47% de los jóvenes de entre 18 y 29 años declaran guardar más dinero físico en casa tras el apagón.

Todo ello entronca también con la percepción que hay en España sobre la necesidad de mantener el efectivo como medio de pago. «El 93% defienden que garantizar el pago en efectivo debe seguir siendo obligatorio, y el 88% de quienes utilizan principalmente tarjeta reconocen su utilidad en situaciones de emergencia», indica el barómetro. Casi ocho de cada diez personas consideran, además, que el efectivo fomenta la autonomía financiera en escenarios de crisis y su uso debería fomentarse como medida de resiliencia.

También, de los resultados del estudio se extrae que en situaciones de emergencia el efectivo es uno de los recursos más valorados por los ciudadanos: el 15% de la población sitúa el efectivo como el segundo recurso más importante en una situación de crisis, tras el agua y los alimentos básicos (60%), por encima incluso de la salud y medicamentos (11%) o la energía e iluminación (6%).

Más en términos generales, la encuesta destaca que tres de cada cuatro personas (74%) consideran que el dinero físico es importante en su día a día, alcanzando el nivel más alto desde 2021. «Su uso diario se concentra especialmente entre las rentas más bajas y las generaciones de mayor edad, consolidándolo como el medio de pago más inclusivo. El 52% de los españoles con ingresos inferiores a 1.200 euros utilizan el efectivo como principal método de pago, mientras que entre las rentas altas predomina la tarjeta. Además, las personas con discapacidad y quienes cuentan con estudios primarios declaran sentirse más cómodas utilizando efectivo que otros medios de pago», recoge el informe.

Asimismo, la encuesta revela que más del 80% de los encuestados consideran que el dinero en efectivo es un medio de pago necesario, y un porcentaje similar lo identifica como un bien público. Sin embargo, los billetes y monedas no son el medio de pago más utilizado en nuestro país.

Según el informe, el pago con tarjeta se consolida como el método más utilizado entre los españoles con un 52%. Justo después aparece el efectivo con un 30%, y mostrando una caída relevante al haber pasado del 46% en 2022 al 30% actual. Asimismo, llama la atención el crecimiento lento pero sin pausa de los que señalan el pago móvil como el más utilizado, al alcanzar ya el 11%; Bizum, por su parte, se sitúa en el 6% y la tendencia es que vaya a más ya que cada vez se permite más su uso en los comercios, especialmente online.

Asimismo, el informe también desgrana posibles preocupaciones respecto al incremento de los pagos digitales. Algo relevante en el entorno actual teniendo en cuenta que en Europa se avanza cada vez más hacia la implantación del euro digital. «La desconfianza hacia la pérdida de privacidad por el uso de métodos de pago digitales se mantiene elevada: el 82% temen filtraciones de datos personales al pagar digitalmente, el 77% temen que se conozca su saldo, el 72% su localización y el 62% sus hábitos de compra», indica el documento.

Respecto al euro digital, el 80% consideran que aumentará el control del Gobierno sobre los pagos; una afirmación que en reiteradas ocasiones las instituciones europeas, el Banco Central Europeo (BCE) incluido, han tratado de rebatir al señalar que los Estados miembros no tendrían acceso a los monederos digitales de los ciudadanos.

«Cerca de la mitad ve el euro digital como un complemento del efectivo, pero cree que terminará sustituyéndolo. El 54% anticipa que no será tan anónimo como el efectivo, y el 30% prevé límites de tenencia, estimando el umbral en 3.000 euros», ahonda el informe. En este sentido, desde Denaria presiona para que se refuerce la protección del dinero en efectivo como «una garantía esencial para la libertad, la privacidad y la resiliencia financiera de la ciudadanía».