Caso Rubiales: la oposición critica al Gobierno por «ponerse de perfil y mirar para otro lado»

No en vano, Franco llegaba a la cita con dos solicitudes de comparecencia del PP y otras similares de Vox, Ciudadanos y el diputado del grupo mixto Pablo Cambronero por este escándalo. Sobre todo por una de sus derivadas más polémicas: el acuerdo de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), que preside Luis Rubiales, con Gerard Piqué para llevar la Supercopa a Arabia Saudí durante seis temporadas a cambio de una comisión de 24 millones de euros para una empresa del hasta ahora jugador del FC Barcelona.

El número dos del ministerio del ramo sólo se ha referido a esta cuestión tras las críticas de los portavoces de PP y Vox, que han insistido en preguntarle por qué no llevo el caso al Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) en lugar de «meterlo en un cajón y mirar para otro lado» o «ponerse de perfil». También le han recordado que esa «permisividad» puede provocar que las supuestas irregularidades de Rubiales y la RFEF prescriban y queden impunes en la vía administrativa.

Franco apenas se ha pronunciado sobre ello muy al final de su réplica y tras dos horas de comparecencia. A pesar de que empezaba diciendo que «me voy a extender en profundidad», sin embargo ha despachado este asunto en un par de minutos para pedir «respeto a la ley y a la presunción de inocencia» de Luis Rubiales: «No podemos hacer tabla rasa y que todo lo que llegue al CSD termine en el TAD», añadió.

La actuación del Gobierno en este «triste episodio», como lo califica Franco, es muy criticada por las entidades que han denunciado a Rubiales y a la Federación tras desvelar 'El Confidencial' este escándalo a mediados de abril. Sobre todo porque, como detalló ABC, Franco se ha negado a llevarle ante el TAD. Una decisión que paraliza la posibilidad de iniciar un expediente sancionador contra Rubiales, que podría acabar incluso en su suspensión al frente de la Federación, en paralelo a la causa judicial que ya se investiga en un juzgado de Majadahonda (Madrid).

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Lo que no ha aclarado, a preguntas de PP y Vox, es por qué, incluso dando por buena esa versión, no llevó las denuncias administrativas contra Rubiales al TAD antes de abrirse la vía penal y por qué tampoco traslada a este organismo supuestas irregularidades que no están en los tribunales ordinarios al tener carácter administrativo y no penal.

Los dos principales partidos de la oposición coinciden en que se trata de un asunto «grave» para los populares y un «absoluto escándalo» para Vox. «¿Por qué favorece este Gobierno al presidente de la RFEF, de quién es tan amigo?», se preguntan los de Santiago Abascal.