Año nefasto para Alonso y prometedor para Sainz

Es el segundo año sin podios para Fernando Alonso desde que fichó por Aston Martin. El curso 2023, con el diseñador Dan Fallows recién contratado de la vera de Adrian Newey en Red Bull, fue un festín para Alonso, quien consiguió ocho podios, siete de ellos hasta el mes de agosto. Cuando los otros equipos empezaron a progresar en las evoluciones de los coches, el Aston Martin se quedó atascado. Y hasta hoy.

Dos campañas de sequía en las que el piloto asturiano siempre ha estado por encima de su monoplaza. El año pasado consiguió un quinto puesto como mejor clasificación y 70 puntos al final de la campaña. En 2025 la cosecha ha sido inferior: lo mejor, la quinta posición de Hungría, pero 56 puntos en el casillero.

Mucho mejor que su compañero Lance Stroll, el hijo del dueño de la escudería, pero eso son migajas para un campeón como Alonso. «Hemos tenido un coche dificilísimo de conducir y somos séptimos en constructores. Hay poco de lo que estar orgulloso. Toca descansar y preparar el año que viene. Conseguimos más puntos de los que esperaba, así que estoy contento«, dice como resumen.

Alonso tiene claro que su caché está por encima de estas expectativas: «Es una de las peores posiciones jamás conseguidas en mi carrera. Hacer décimo en el campeonato de pilotos es horrible para mí. Las expectativas para 2026 son más altas de lo que los hechos pueden hacer o decir, entramos a un territorio desconocido y nadie puede decir que va a ir rápido porque no tenemos ninguna referencia o rumor de otros equipos«, comentó a As.

Las sensaciones son diferentes para Carlos Sainz, un piloto que suele encontrar problemas de adaptación con los coches nuevos. Le sucedió con el Williams como le pasó hace años con el Ferrari o el McLaren. Un inicio de temporada titubeante y una potente reacción final.

Pero no conviene que nadie se engañe, pese a que se ha instalado la idea de que Sainz ha barrido a Hamilton, el piloto que lo desalojó de Ferrari. El año pasado el madrileño consiguió 290 puntos (quinto, con dos victorias y seis podios) y este año ha logrado 64 (noveno en el Mundial y dos podios).

Pese a que el debut de Hamilton con Ferrari ha sido nefasto, por primera sin podios y siempre desesperado, el inglés ha conseguido más puntos que el madrileño (156, sexto en la general del Mundial). Sucede que las expectativas del británico eran muy altas y el resultado muy pobre, comparado consigo y su trayectoria (siete títulos, los mismos que Schumacher, más que nadie en la historia).

«Estoy muy contento por cómo termina la temporada. El inicio fue frustrante, pero conseguimos rematar muy bien el año», comenta el español.

Sainz recordó sus primeros días en Williams, cuando no tenía patrocinadores, el mono casi blanco y pocas luces en el horizonte con una escudería histórica que había sido la peor durante varios años.

«El año pasado, cuando firmé por Williams, sabía que iba a dejar de ganar carreras y que tendríamos por delante un proceso largo, pero confiaba en que podíamos ir hacia adelante. No hemos vuelto a ganar, pero sí hemos vuelto a los podios bastante antes de lo que la gente esperaba, así que es un paso importante del equipo y en mi carrera que de momento pinta bien, es positivo. Tengo ganas de seguir apretando y de que el equipo siga haciendo un esfuerzo. Porque los podios ya no son suficientes, ahora hay que ir a por el siguiente paso».