España cae ante Canadá (80-85), pero deja buenas sensaciones en su ensayo de cara al Mundial

Se presentaba Canadá como una de las favoritas a ganar el Mundial que comienza en unos a días a pesar de la baja de Jamal Murray. La plantilla de Jordi Fernández, plagada de estrellas, era una buena piedra de toque para saber dónde se encontraba España y para que Scariolo empezara a tener claro a quién descartar para viajar a Indonesia la próxima semana, donde se enfrentarán a Brasil, Irán y Costa de Marfil.

Salieron los de la hoja de arce como un vendaval. Con dos triples seguidos de Barret, que junto a Powell y Shai se convirtieron en la pesadilla de los españoles. La Familia lo intentaba desde el perímetro pero no encontraba el acierto. De los nueve balones lanzados desde la línea de tres solo entraron dos (Aldaba y Llull). Scariolo pedía más dureza en los duelos individuales pero Canadá no mostraba puntos débiles. La entrada de Rudy Fernández y Sergi Llull imprimió algo más de ritmo.

Excelente entrada del combinado nacional en el segundo cuarto e ilusionante conexión entre Rudy y Garuba. Dos triples, de Rudy y Claver colocaban a España por delante (29-28) por vez primera en el encuentro. No se llevaban ni tres minutos del segundo cuarto. Se crecía Garuba en la pintura. El jugador de los Oklahoma City Thunder aumentaba la ventaja. Sufría Canadá, que en cinco minutos solo pudo anotar un punto. Se llegó al descanso con los locales ganando de cuatro puntos, indicador de la intensidad defensiva de España, que solo permitió que los canadienses anotaran 13 puntos y se proyectaron en ataque con el acierto de Claver y los hermanos Hernangómez.

España bajó la intensidad en el tercer cuarto, lo que permitió a Canadá mantenerse viva e incluso ponerse por delante (50-51) a falta de 4:41. «No estamos jugando en equipo. No he visto una jugada en equipo», les recriminaba Scariolo durante el tiempo muerto que se vio obligado a solicitar. Emergió la figura de Rudy cuando pero lo estaban pasando para dar oxígeno con un triple y permitir afrontar el tramo final con un pírrico punto de ventaja, pero ventaja al fin y al cabo.

La caída de Alberto Díaz y su posterior retirada a vestuarios dejó cierta desazón en Málaga aunque se espera que su torcedura de tobillo solo quede en eso. Quedaban cinco minutos y el partido estaba en tablas (64-64). Se llegó ajustado al final, con los de Scariolo subiendo la intensidad en defensa y con Joel Parra enchufado en el tiro. Al final, prórroga. Canadá supo gestionar mejor los minutos finales pero la derrota deja buenas sensaciones.