'Fachada, foto, fiesta, futuro, fideos', de Jordi Colomer en el MACBA: El artista que se bebe las calles

Esta antológica peculiar, llena de giros y perspectivas imposibles hacen esencia de la intensa obra de Colomer en sus múltiples acabados, desde los 80 hasta la actualidad, tratando temas variados pero que se urden entre sí de manera tan cómoda que trasciende el peculiar desorden intencionado en que se encuentran presentados.

De esta manera, la ocupación del atrio y la balconada, con llamativas piezas como 'Maravillas' (1995), un maravilloso rótulo que no se sabe si está en construcción o en proceso de deterioro, o las 'Gigantas', que tomarán vida en momentos clave de activación, se ve más que justificada.

La producción de Colomer nos lleva a viajar por la utopía de manera transversal en el espacio y el tiempo, de maquetas a fotos, desde el vídeo a la 'performace', con un perfil cercano y dinámico que lo impregna todo. Unifica momentos y realidades creando un imaginario nuevo en el que todo es posible. Las grietas entre realidad y ficción dan pie a múltiples significados.

La utopía, como el lenguaje y el texto, crean una realidad escenificada exenta de drama, con el humor como estandarte, entre la ensoñación y la resonancia de una verdad latente; una verdad que fue, que pudo ser o que podría llegar a ocurrir. Los 'Prototipos FAI' (2004) son buen ejemplo, con las maquetas de blindados prototipados durante la Guerra Civil, acompañadas de imágenes de reactivación de lo que pudo haber sido.

Especialmente interesante en la muestra es detectar piezas de sus inicios y relacionarlas con sus producciones más actuales, extravagantes y complejas. Se detecta en ellas el germen de lo que ha ido desarrollando. Desde sencillos 'collages' con los que conforma ideogramas, como es el caso de 'Pulga' (1993), en el que cuatro sencillos y diminutos recortes dan sentido a un hule blanco de grandes dimensiones, frente a esculturas abstractas, las maquetas monumentales o imágenes de urbes en constante mutación.

Todo ello desprende una misma magia que conecta con sus llamamientos a la activación, sus procesiones en las que además encuentra la complicidad de participantes y público. El trabajo desde su estudio encuentra un reflejo vívido en sus obras más experienciales, que se disfrutan en sala con unas proyecciones que conectan objetos y realidades. De 'Anarchitekton' (2002-4), 'No? Future!' (2006) y 'Medina Parkour' (2014), pasando por 'Abecedario argentino' (2023), 'New Palermo Felicissima' (2018) o 'Modena Parade / Corteo Modenese' (2022), va de lo individual a lo colectivo, dando todo el protagonismo al acontecimiento, sobre el que enfoca de manera teatral pero real.

Su temática activista es universal y tratada desde el aspecto más utópico. Feminismo, postcolonialismo o desarrollo urbanístico son algunos temas que desacraliza y materializa escénicamente desde una vertiente brechtiana que potencia la imaginación. Su interés recae en las mutaciones que esas cuestiones pueden aportar, y no tanto en mitificar estructuras de pensamiento concretos.

La cita explora la materialidad de la ficción mediante objetos-escultura que Colomer traslada a las calles para reflexionar sobre lo provisional y lo periférico como rasgo identitario de la comunidad y la utopía.