Hernán Cortés, un hombre de letras

A pesar de ello en el mundo académico y en el editorial se sigue dando a los grandes personajes de la Historia la importancia que merecen y por ello felizmente vemos publicada esta nueva biografía, en la que el historiador Esteban Mira Caballos arroja nueva luz sobre la vida de Hernán Cortés, valiéndose de nuevas investigaciones que nos permiten entender su gesta histórica desde la perspectiva del siglo XXI.

Cortés logró doblegar al mayor imperio que existía en América y poner bajo soberanía española una buena parte del nuevo mundo. Una hazaña digna de los grandes conquistadores de todos los tiempos. Para entender que fuera capaz de llevarla a cabo el autor analiza al personaje desde sus orígenes en la Extremadura bajomedieval. Una ambición desmesurada y avidez por la conquista explica por qué no se conformó con alcanzar una buena posición en las Antillas españolas y buscó oportunidades para ensanchar el imperio español hasta que se encontró cara a cara con el emperador Moctezuma ante el reto de tomar posesión del imperio azteca.

La conquista de México , sobre la que tanto se ha escrito forma el núcleo central de esta biografía. Tiene la virtud de desmontar muchos mitos que han sobrevivido cinco siglos, como el tantas veces relatado de que Cortés ordenó la quema de sus naves en Veracruz; también el de Cortés como gran estratega militar.

Pero lo cierto es que no tuvo formación military; como bien subraya Mira Caballos, Cortés no es de la estirpe de Alejandro Magno ni de Julio César sino que le describe como «un hombre de letras con grandes dotes diplomáticas». La clave de su éxito fue su capacidad dialéctica y su carisma. Sabía ganarse a todos los que le rodeaban, utilizando a conveniencia su don de gentes. Esto explica que lograra forjar alianzas con varios de los pueblos sometidos por los mexicas que iba a permitirle alcanzar la victoria final.

La crueldad es también una característica bien comentada sobre Cortés, pues a pesar de que logra llegar hasta Tenochtitlan pacíficamente, su conquista definitiva iba a estar presidida por la violencia y el pillaje, como era el caso en todas las conquistas medievales. En la matanza de Cholula y la ejecución de Cuauhtémoc surge un Cortés que nos recuerda a César Borgia . Luego está el Cortés mujeriego y su relación con la famosa india Malinche en la que se mezcla el erotismo con la ambición política, como en la de Marco Antonio y Cleopatra, y fruto de esta nacería Martín Cortés conocido como el primer mestizo de nueva España.

Su menos conocida faceta de explorador y la de fundador de ciudades y colono es analizada en profundidad en este libro, hasta el punto de considerarle el primer criollo que al verse morir en Sevilla dejó escrito que llevasen su cuerpo a su querida Nueva España. Tras esta descripción de Hernán Cortés con sus luces y sombras y la fantástica historia que protagonizó, ¿cómo debemos recordarlo en el siglo XXI? Esteban Mira lo deja muy claro: «No como el aniquilador de un mundo sino el constructor de un nuevo orbe: el del México mestizo que hoy conocemos ». Recuerda a la sentencia de Octavio Paz sobre él: «No es fácil amarlo pero imposible no admirarlo».