Un test visual muy sencillo mide la inteligencia

Ahora una investigación de la Universidad de Rochester propone una nueva y sencilla forma de medir el Cociente de Inteligencia (CI), capaz de eliminar algunas de las limitaciones asociadas con las pruebas estándar.

Se trata una tarea visual tan simple como determinar en qué dirección se mueve una barra que aparece en la pantalla de un ordenador: a la derecha o hacia la izquierda. Las barras se presentaron en tres tamaños, con la versión más pequeña restringida al círculo central del campo visual, donde la percepción del movimiento humano es óptima, que coincide aproximadamente con la anchura del pulgar con el brazo extendido. Este ejercicio sorprendentemente simple es capaz de medir la capacidad inconsciente del cerebro para filtrar movimiento visual irrelevante.

Además a los participantes se les pasó el test Wais-IV, para determinar su CI. Como era de esperar, las personas con CI mayor eran más rápidas en captar el movimiento de las barras al observar la imagen más pequeña. Los resultados están en la línea de investigaciones anteriores que sostienen que las personas con mayor CI son capaces de hacer juicios perceptuales más rápido y tienen mejores reflejos.

Sin embargo, cuando se presentaron las imágenes con las barras más grandes, cuanto mayor era el CI, mayor era el tiempo que necesitaban las personas para detectar la dirección de movimiento de las barras. Al parecer, esa incapacidad para percibir la dirección de movimiento de las imágenes mayores es un marcador de la capacidad del cerebro para ignorar el movimiento de fondo, que generalmente es menos importante que el de los pequeños objetos que están en primer plano. “Es lo que ocurre cuando conduce su coche, se camina por un pasillo o simplemente se mueven los ojos alrededor de la habitación: el fondo está constantemente en movimiento”, explica uno de los autores. Y ese movimiento ha de ser ignorado.

Según el estudio, las personas cuyos cerebros eran mejores a la hora de suprimir automáticamente ese movimiento de fondo eran también las obtenían las mejores puntuales en los test de inteligencia habituales. Lo que aporta este nuevo estudio es la relación entre la capacidad de filtrar información irrelevante, como el movimiento de fondo, y una mayor puntuación en el test de inteligencia, es decir un mayor CI. La correlación obtenida era del 64%, mucho mayor que las que relacionan la inteligencia con cualquier otra característica, como discriminación del color, sensibilidad al tono, y tiempos de reacción, que han encontrado sólo una correlación de 20 a 40%.

La relación entre CI y la supresión del movimiento de fondo apunta a los procesos cognitivos fundamentales que sustentan la inteligencia, señalan los autores. “El cerebro es bombardeado por una abrumadora cantidad de información sensorial, y su eficacia se basa no sólo en la rapidez con que nuestras redes neuronales procesan estas señales, sino también en lo buenas que son al suprimir la información menos significativa. "El procesamiento rápido es de poca utilidad, a menos que esté restringido a la información más relevante", concluyen los autores.

Según los investigadores, se trata de la primera evaluación puramente sensorial que tiene una fuerte correlación con el CI y puede proporcionar una herramienta no verbal y culturalmente imparcial para entender los procesos neurales asociados con la inteligencia general. Además este nuevo test visual podrá ser utilizado también para medir el CI en personas con discapacidad intelectual.