Judías verdes

La judía verde se siembra de forma escalonada en primavera y es uno de los regalos nutricionales de las estaciones cálidas. Tiernas a la par que crujientes, existen diferentes variedades y son perfectas para consumir tanto en preparaciones calientes como frías. Se trata del fruto de una planta trepadora de la familia de las Fabáceas, generalmente, de forma aplanada y alargada y, tal como indica su nombre, de color verde, que contiene semillas en su interior. La vaina es comestible y cuando se consume tierna y fresca si se considera verdura.

Cuando se seca la vaina, se vuelve fibrosa y las semillas comestibles adquieren distintos colores y las vemos negras, blancas, rojas, pinteadas… conocidas como alubias , frijoles, habichuelas, pochas o chícharos, entre otros nombres.

Lo habitual es distinguir entre redondas y planas pero también hay, además de verdes, amarillas, jaspeadas marrones o rojas sobre el verde. Como la patata o el tomate, son de origen americano y se cultiva desde el 5000 antes de Cristo. A través de España se distribuyó por el resto de Europa al principio del siglo XVI.

Ricas en vitamina C , las judías verdes contrarrestan los efectos negativos de los radicales libres, frenando el envejecimiento celular por lo que es un excelente antioxidante. También tienen un buen aporte de vitamina A que junto al zinc y a la mencionada vitamina C , favorecen la salud del sistema inmunológico. La vitamina K ayuda a mantener los huesos fuertes y sano y la cantidad de potasio y de magnesio reduce la hipertensión. Ricas en fibra , favorecen y regulan el tránsito intestinal combatiendo el estreñimiento.

Las judías verdes aportan 31 calorías por cada 100 gramos y sin embargo son muy saciantes por lo que se convierten en un ingrediente perfecto para incluir en las dietas de pérdida de peso. En cualquier caso, son muy adecuadas para su consumo habitual y pueden aprovecharme de múltiples maneras ya que resultan muy versátiles.

Existen más de cien variedades de judías verdes . Entre las más comunes están:

- Judía Garrafal enana : plana, ciclo medio y porte bajo.

- Judía Jumbo : redondeada, sin hebras, grano verde claro, tamaño pequeño.

- Judía Kora : vainas ligeramente curvadas, sin hebras y grano verde claro.

- Judía Mocha : vainas rectas, granos elípticos.

- Judía Bobby : verdes, alargadas, redondas y grano violeta.

- Judía Rasta : valencianas, verde, alargadas y granos en forma de riñón.

- Judía Herradura : vainas curvadas.

- Judía Buenos Aires : vaina con sección aplanada.

- Judía Garrafal Oro : sección aplanada y hoz muy marcada.

- Judía Perfection : sección tubular, granos aplastados.

Las judías verdes deben conservarse en el frigorífico, si puede ser en una bolsa o en un recipiente abiertos, incluso pueden picarse y congelarse para utilizar durante el inverno, cuando no se recolectan. En general, frescas aguantan en torno a una semana en la nevera. Al comprarlas hay que ver que tengan la piel tersa, sin manchas y que al partirlas crujan y se vean jugosas.