El delta del Ebro podría desaparecer a final de siglo si no se toman medidas

Así se desprende de un minucioso estudio encargado por el Departamento de Medio Ambiente de la Generalitat , que constata la vulnerabilidad de este entorno, pero a su vez plantea posibles soluciones para prevenir que eso ocurra. Según el informe, en el año 2050 habrá un ascenso de 15 centímetros en el nivel del mar, pero el escenario más pesimista se sitúa en 2100, cuando el aumento podría ir de los 40 centímetros hasta un metro.

Los sistemas naturales de la franja de la costa, como las lagunas litorales, corren un claro peligro de afectación porque las playas y dunas muestran ya cierta capacidad de retroceso. Si no se actúa, los núcleos urbanizados de la zona también acabarían desapareciendo, así como los campos de arroz, uno de los motores económicos del lugar. También podría haber afectaciones en las infraestructuras viarias e hidráulicas de primera línea de costa: los puertos de L´Ampolla, Deltebre y Sant Carles de la Ràpita.

Para que esto no suceda, la Generalitat propone un conjunto de medidas de prevención que evitarían que el delta quede sumergido bajo las aguas. Estas soluciones pasarían por la formación de sistemas de dunas, el abandono progresivo de algunas zonas urbanizadas que se encuentran en riesgo o la construcción de infraestructuras de protección, entre otras.

Francesc Baltasar, conseller de Medio Ambiente, anunció que primarán las soluciones «blandas», es decir, aquellas menos invasivas con el terreno, y explicó que «estas medidas se llevarán a cabo con la participación de todos los agentes del territorio».

Un momento esperado

Los alcaldes se han mostrado satisfechos por este primer paso para preservar el entorno del delta. En concreto, Gervasi Aspa, alcalde de Deltebre, manifestó su alegría por que «se está afrontando el tema con realismo y nos están planteando soluciones para el que el delta no pierda ni un centímetro. Este era un momento esperado por nuestros pueblos hace años».

La entidad Ecologistas en Acción expresó en un comunicado que ya habían alertado del problema hace tiempo e instaron al Govern no sólo a tomar medidas para que el delta aguante, sino a actuar directamente para mitigar los efectos del cambio climático, como reducir la emisión de gases de efecto invernadero.

Por otra parte, cerca de la desembocadura del Ebro, en la localidad tarraconense de Flix, tres crías de cigüeña blanca (ciconia ciconia) han nacido en la comarca de la Ribera d´Ebre, en un nido hecho por el personal de la depuradora de Flix, que ha colaborado así con el Proyecto de reintroducción de esta especie. Se trata del primer nacimiento de polluelo de esta especie dentro de este tipo de instalaciones. El nido fue creado hace cinco años por el personal de la depuradora debido a su ubicación dentro de la Reserva Natural de Sebes, meandro de Flix, y está habitado por una pareja de cigüeñas.