Las enormes canteras que sirvieron para construir Menorca durante dos siglos
Las Pedreres de S'Hostal-Lithica, cuya actividad se prolongó hasta 1994, se han convertido en un recinto lúdico y cultural en el que disfrutar de la historia y la naturaleza
Las calas más bonitas de Menorca (y entre las más bellas del Mediterráneo)
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Iniciar sesiónSituado a un kilómetro del Camí Vell, no muy lejos de la Ciutadella de Menorca, está Ses Pedreres de S'Hostal-Lithica, unas canteras de piedra de marés cuyo material se destinó durante alrededor de 200 años a la construcción de edificios ... en la isla. El recinto, que abarca un total de 7 hectáreas, contaba con una zona de extracción manual, cuya actividad se prolongó hasta 1960, y una zona moderna de extracción mecánica que estuvo en activo desde esa fecha hasta su cierre en la primavera de 1994. En sus últimos años, los canteros se convirtieron en los artífices de la recuperación paisajística de los espacios excavados rellenándolos con tierra vegetal y convirtiéndolos en huertos con hortalizas y árboles frutales. Posteriormente el espacio quedó abandonado, lo que posibilitó la aparición de vegetación silvestre y la piedra, expuesta a la intemperie, se fue erosionando y coloreando de múltiples tonalidades ofreciendo todo un espectáculo de texturas y cromatismo.
Fue entonces cuando, para evitar la desaparición de este espacio bajo los escombros, surgió Líthica, una fundación privada sin ánimo de lucro que llevó a cabo una gran labor de rehabilitación para convertir esta joya menorquina en un espacio lúdico y cultural. Gracias a su intervención estas canteras se convirtieron en un paisaje escultórico único herencia de uno de los oficios más tradicionales de la isla, el de trencador.
En la actualidad, este mágico lugar, declarado Bien de Interés Cultural por el Consell Insular de Menorca, introduce al viajero en un museo al aire libre mediante visitas didácticas y guiadas que permiten descubrir todos sus secretos.
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Un espacio en el que arte y naturaleza se funden
El recinto, que se presenta como un espacio esculpido tallado en el paisaje con imponentes paredes verticales de piedra, ofrece diferentes zonas en las que pequeños y mayores pueden disfrutar de una agradable jornada.
Alrededor de una fuente enmarcada en rosas que simbolizan la vida y el alma se extiende El jardín medieval de hierbas medicinales, el cual simboliza la mente a través de la compresión de la naturaleza. Por otro lado, está El circuito botánico y de la biodiversidad que, iniciado en el año 2000, es un conjunto de jardines creados para la conservación de la flora autóctona de Menorca con una finalidad educativa y de divulgación. La representación de las diversas especies de vegetación que crean un diseño diferente para cada cantera se complementa con carteles informativos con contenidos de botánica, zoología, geología y etnología.
Los amantes de los retos encontrarán de lo más atractivos sus diferentes laberintos. Con 600 metros cuadrados y una altura de 1,6 metros El Mineral, diseñado por Laetitia Lara en colaboración con Nuria Román y Basile Ribas, se inspira en el del Minotauro. Situado a los pies del Tótem y en lo más hondo de la cantera de extracción mecánica, este gigante de piedra es de planta cuadrada con múltiples caminos y un centro que invita al reto personal o en grupo. Su concepción artística lo convierte en una intervención land-art en las canteras, con las canteras. También hay un pequeño estanque circular con agua depurada por vegetación y un vestíbulo arquitectónico.
El laberinto vegetal muestra un diseño que coge inspiración en la tradición de los laberintos cretenses de esquema circular univiario. Su esencia vegetal, habitado por plantas aromáticas y hasta 18 especies autóctonas, evoluciona al ritmo de las estaciones. Tiene una superficie de 177 metros cuadrados, un diámetro de 15 metros, siete tramos de pavimento de marés de 60 cm de anchura y siete setos de 35 cm de altura. Por su parte, el de los Vergeles teje una trama laberíntica cuya esencia es el encuentro de lo mineral y lo vegetal.
Un espacio vivo
S'Hostal se ha convertido también en un gran teatro que acoge cada año durante el verano el Fosquet de Lithica, un festival que ofrece espectáculos de danza, circo, teatro, y mucha música. Es en el fondo de la cantera más profunda -27 metros–, que presume de tener una acústica espectacular, donde se desarrollan dichas representaciones.
Además, desde la organización ofrecen talleres didácticos sobre los oficios de piedra para escolares, así como cursos para escultores y principiantes en los que se elaboran elementos de piedra destinados al recinto –señalización, iluminación, mobiliario…–, así como pequeñas piezas destinadas a la venta. También se pueden alquilar los diferentes espacios para el desarrollo de actividades y eventos promocionales, de publicidad, localizaciones fotográficas o como plató de cine. Así mismo, la organización está abierta a compartir esta joya con asociaciones y colectivos para la realización de acciones sociales, deportivas y eventos solidarios, de hecho, actualmente comparten una cantera con el Centro de Recuperación de Fauna Silvestre del GOB.
El recinto está abierto todo el año y el precio de la entrada general es de 7 euros.
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