Entrenadores personales, una dosis extra de motivación

Ellos, motivadores por naturaleza, saben muy bien cómo hacer a sus clientes lograr el objetivo que se han puesto o vencer a la pereza. “No creemos en las “operación bikini” ni “operación turrón”. No hay milagros: hay constancia, alimentación y descanso, ese es el truco” , afirma Raquel López , CEO de MAMIfit SL, Co-Fundadora de BellyHub y formadora oficial de Técnica Hipopresivas. Ella es precisamente la responsable de la rápida recuperación de la cantante Soraya tras el parto de su hija Manuela o de la incursión de Cristina Pedroche en el mundo de los hipopresivos.

Como Raquel, muchos son los profesionales que se encargan de que los famosos cultiven su cuerpo a pesar de sus apretadas agendas. Noe Tadea lo hace con Pilar Rubio, Álvaro Yáñez con Amaia Salamanca, Iñaki García con David Bustamante, Juanjo Rodríguez con Paula Echevarría, y un largo etcétera de ejemplos que corroboran que el tándem entrenador personal - celebrity triunfa.

La razón está clara: además de ofrecer privacidad (algo a valorar por los rostros conocidos que desean ponerse en forma sin preocuparse de que otros les pillen con el sudor en la frente y la lengua fuera mientras levantan el balón medicinal) sus sesiones resultan mucho más eficientes que un entrenamiento en el gimnasio, el tratamiento es totalmente personalizado y la dedicación es exclusiva. De ahí que quienes contraten sus servicios sean perfiles muy dispares: “desde gente que vive de su imagen a personas de 80 años que quieren vivir mejor con agilidad o personas con multitud de lesiones que buscan recuperarse” , explica Juanjo Rodríguez. “Buscan a una persona que les guíe y oriente para poder ponerse en forma y cambiar su estado actual de salud”, prosigue.

Por supuesto el precio es más elevado que el de una cuota de gimnasio tradicional (de media cuesta alrededor de 60 euros la hora) pero eso no frena a los que tratan de iniciarse en el mundo del deporte a contratar sus servicios como hacen los famosos. “ Hay dos perfiles de clientes: los que buscan calidad, conocimiento y cercanía; y los que buscan un precio bajo, sin importar la formación que tenga la persona que contratan y desconociendo lo caro que sale una persona no formada. Esto tiene muchas consecuencias y muy graves”, explica López. Tanto es así que el pasado mes de noviembre se aprobó la Ley de Regulación de Profesiones Deportivas que exige titulación o experiencia a los monitores físicos con riesgo de multa de 30.000 euros a quienes lo incumplan. Una medida que trata de evitar que crezca el intrusismo en esta profesión, en la que se calcula existe en más de un 40% de los casos. Hasta 30.000 euros de multa y en la que, por otra parte, el empleo sumergido y el fraude laboral supone el 30% de las personas que lo ejercen.

La dieta, las horas de sueño, el estilo de vida… todo influye a la hora de entrenar. Es por esto que los profesionales recomiendan que todos deberíamos pasar por sus manos al menos durante un periodo: “para conocer los ejercicios, cómo deben cuidarse, que deben hacer para su objetivo, etc”, cuenta Rodríguez. Sobretodo si se trata de alguien que quiera iniciarse en el mundo del deporte. “Que busque un profesional formado y que se asesore correctamente” , anima Raquel. Todos coinciden que no existe ningún ejercicio infalible y que lo importante es saber qué le va bien a cada persona y cómo debe ejecutarse. Realizar sesiones de 2-3 días a la semana bastarán para alguien que no sea profesional de ninguna disciplina y, lo más importante, “buscar algo que les motive para los inicios sean más llevaderos, el problema está en ser constantes”, puntualiza Juanjo.