Demostrado, entrenar con frío es tu aliado para prevenir las arrugas y perder peso

No lo decimos nosotros, según un estudio realizado por la Mayo Foundation for Medical Education and Research, entrenar regularmente en ambiente frío reduce la posibilidad de padecer gripe en un 20 o 30%. Además, fomenta el aumento de la producción de endorfinas -las llamadas hormonas de la felicidad- que te harán sentirte mucho más contento y sereno.

Pero eso no es todo, a nivel estético también resulta excelente para tu piel. De hecho, podríamos afirmar que incluso más que la mayoría de cremas antiarrugas. "Con el frío solemos pasar mucho tiempo en interiores y el cutis no 'respira' del todo. Cuando sales a correr activas la microcirculación de la piel, especialmente la de los capilares más pequeños, que normalmente no están activados y con este ejercicio aeróbico haces que se 'desatasquen' y mejore el flujo sanguíneo e n todos ellos. Como resultado, el aporte de oxígeno es mayor, así como su correspondiente eliminación de toxinas", explica Coral Oñate, especializada en cuidado de la piel y propietaria del centro de estética homónimo en la capital.

La experta cuenta además que al mejorar la microcirculación la nutrición natural de la piel es mayor , superando el aporte de cualquier crema; y apunta que la vitamina D, responsable del desarrollo de huesos y músculos, se fijará mejor.

Si buscas perder peso y tonificar la figura con más rapidez también es una magnífica alternativa, así nos lo explica la personal trainer Gemi Osorio, propietaria del centro ‘Pilates y movimiento’, que además de lo mencionado anteriormente, añade que también se notará una mejora en la capacidad cardíaca , se reforzará el sistema inmunológico y se ganará más presión arterial.

“Vamos a aumentar el gasto calórico, además está comprobado que por mucho que sudemos no estamos quemando grasa corporal ya que el sudor es la termorregulación de la piel. Cuando bajan las temperaturas se activa el consumo de grasa ya que con el frío el cuerpo necesita quemar más calorías para mantener la temperatura corporal y poder realizar el ejercicio. También hay que considerar que a las bajas temperaturas no corremos el riesgo de deshidratarnos, aunque eso no quiere decir que no necesitemos agua durante nuestro entrenamiento”.

La entrenadora comenta también que no hay que olvidar antes de entrenar realizar un buen calentamiento de unos 10 o 12 minutos , de forma progresiva en músculos y tendones con el fin de evitar lesiones. También hay que tener en cuenta si el entrenamiento que vamos a realizar va a ser de una intensidad media/alta o sostenida con pocos tiempos de recuperación para no perder así la temperatura corporal.

Por otro lado, no hay que olvidar llevar la ropa adecuada . Los expertos recomiendan un mínimo de tres capas con prendas ligeras e impermeables: no pueden faltar un gorro y guantes, ya que son zonas en las que el cuerpo se enfría antes. “Si eres corredor habitual no se puede llevar el mismo ritmo cuando se entrena con frío ya que las temperaturas y condiciones climatológicas pueden dificultarlo (por ejemplo, cuando hay nieve). También hay controlar la superficie en la que se va a realizar ya que, por ejemplo, con hielo, va a costar mucho más. Hay que estar muy atento a la pisada y por dónde se va para evitar resbalones y caídas”, concluye.

Por último, apunta que al finalizar el entrenamiento, al llegar a casa, resulta crucial estirar ya que se puede producir un acortamiento en la musculatura al estar en frío que pueden desembocar en lesiones posteriores.

Una vez dicho esto y sabiendo todo lo positivo que te puede aportar… ¿a qué esperas para empezar a ponerte en forma hoy mismo?