Shearling jacket, así se lleva la chaqueta de la temporada

Ahora es tiempo de jerséis y de chaquetas , dos de las prendas que más puede exprimir un hombre estiloso y que mejor definen la personalidad de quién las lleva hasta que demos la bienvenida definitiva a los abrigos. De los primeros ya hablamos largo y tendido , de modo que es momento de centrarnos en la segunda. Concretamente en la 'shearling jacket', considerada la reina de la temporada junto con la siempre presente biker.

Un buen vestidor masculino debe estar siempre pendiente de las tendencias, pero lo fundamental es hacerlo sobre una base sólida atemporal de prendas clásicas que nunca pasan de moda gracias al estatus alcanzado desde hace décadas. Y esto es precisamente es lo que ocurre con chaquetas como la biker o como la shearling, elevadas al ‘salón de la fama’ de la moda masculina por el cine, el gran vehículo de este tipo de prendas en su ascenso a los altares. Hoy en día, si te enfrentas a una de estas prendas, podrás verte o no con ella en base a tu gusto personal, pero no podrás evitar al menos pensártelo dos veces por el enorme atractivo que despierta.

Las chupas de piel son tan viejas que su origen se remonta a los inicios de la domesticación de animales como la oveja, porque ya en la prehistoria era un material muy utilizado para combatir el frío, siendo además muy cómodo y adaptable para facilitar las tareas de la época, fundamentalmente la caza. Durante la época medieval, con la expansión de las rutas comerciales, la lana siempre tuvo un valor altísimo y un gran protagonismo en todas las transacciones, y ya en el s.XX fue cuando los dos ámbitos más influyentes en la moda masculina entraron en acción para convertirla en icono: el militar y el cine.

La Segunda Guerra Mundial catapultó a la aviación, lo que convirtió a los pilotos en influencias más allá del ejército. Sus bomber con piel de oveja -sobre todo el modelo B3 utilizado por los norteamericanos y el Irvin de la Real Fuerza Aérea británica- están en la memoria de todos incluso hoy en día, en gran medida gracias al segundo elemento, el cine, que además de reflejarlas tal cual en las películas bélicas, se inspiró en los aviadores para exportar su estilo a la calle.

Por eso, en los años 50, Marlon Brando en la oscarizada ‘On the waterfrond’ (‘La ley del silencio’ en castellano), y por supuesto James Dean , al igual que hizo con la biker, convirtieron en icono definitivamente este tipo chaquetas que deben su nombre al característico borrego exterior, ya sea en cuellos, puños o cintura, que es una mezcla de la lana de la oveja pero también de la piel, de ahí que la industria textil esté recurriendo cada vez más a soluciones sintéticas cada vez más avanzadas y similares al ‘shearling’ de origen animal.

Puede parecer que los años 50 quedan demasiado lejos como para ser la causa de que la ‘shearling’ sea una chaqueta de actualidad más de 60 años después, y la realidad es que también tiene mucho que ver en ello el repunte de popularidad que vivieron de nuevo con el séptimo arte como culpable, pero en este caso el de los años 80, con la mítica película ‘ Top Gun ’ y a la cabeza, protagonizada por Tom Cruise.

Precisamente ‘Maverick’ , que así se llama el papel que Cruise protagoniza en la cinta, es una fuente de inspiración perfecta para entender las virtudes de la shearling jacket antes de elegir cómo lucirla. Es una chaqueta poderosa, con una fuerza sobresaliente , que tiene mucho peso en el look en el que se incluya, no solo por ser una prenda exterior, sino por lo llamativa de sus tonalidades, generalmente tonos tierra. Las opciones oscuras, ya sean marrones, negras o verdes, siempre atenúan un poco esa sensación hipnótica. Además, es una prenda cómoda, cálida y versátil debido a su origen militar, por lo que es una ventaja a la hora de combinarla.

Siempre dentro de un estilo informal, casual, es un acierto, tanto si lo haces con jeans, con James Dean en el recuerdo, como si te decantas por unos chinos. En cualquier caso, y aunque para gustos están los colores, los básicos son elecciones excelentes para que la shearling luzca sin excesos ni ornamentación que despiste, todo su esplendor. Un jersey liso o acanalado de cuello alto que brille si te abres la chaqueta y unas botas chelsea que añada todavía más masculinidad al look son dos ejemplos de cómo sacar partido a esta cazadora del momento.