El 'toqueteo' breve no es delito, según un tribunal de Roma

Los jueces absuelven a un bedel porque manoseó a una estudiante romana «entre 5 y 10 segundos», sin intención de molestarla al tratarse de una broma

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Ángel Gómez Fuentes

Corresponsal en Roma

Se ha generado una fuerte polémica en Italia por el caso de un conserje absuelto de la acusación de agresión sexual después de tocar las nalgas de una estudiante. Antonio Avola, de 66 años, conserje del instituto Cine TV Roberto Rossellini de ... Roma, tocó los glúteos a Laura, una alumna de 17 años.

Tras ser acusado de violencia asexual, un tribunal ha absuelto al conserje, al estimar que el toqueteo de la joven fue «breve, torpe y accidental». Textualmente, los jueces dicen que «parece convincente la tesis del defensor del conserje, que lo considera como acto de broma». En consecuencia, la sentencia del tribunal fue absolutoria, «porque el hecho no constituye delito».

El caso se remonta al 12 de abril de 2022. Cuando la joven subía las escaleras con un amigo para entrar a clase, notó que se le bajaban los pantalones y que alguien ponía sus manos debajo de su ropa interior, tocando las nalgas y agarrando las bragas. Al volverse, la joven vio al conserje que le dijo en dialecto romanesco: «Amor, sabes que estaba bromeando». Laura se alejó, muda por la indignación. En la sala del tribunal, el conserje negó que sus manos se introdujeran bajo los pantalones de la joven y que tuviera intención de agredir sexualmente. No lo consideró así el fiscal, que pidió una pena de tres años y medio de prisión.

Los jueces creyeron la historia de la joven, asistida por la abogada Andrea Buitoni. Pero para el tribunal de Roma «la acción duró un puñado de segundos, sin que hubiera insistencia en el manoseo», una maniobra, «torpe pero carente de lujuria», según los jueces. El tribunal no lo consideró delito al carecer el hecho de «intención libidinosa, como generalmente exige el derecho penal», para llegar a una sentencia condenatoria.

La joven estudiante se mostró indignada tras la absolución del conserje: «Esto no es justicia. Me equivoqué al confiar en las instituciones, porque me sentí traicionada dos veces. Primero en la escuela y luego en el Tribunal. Después de esta decisión de la Justicia, si una chica es manoseada, terminará pensando que no vale la pena denunciar una agresión. En mi caso, la denuncia la presentó la escuela, que me apoyó. Hay que denunciar para que se haga justicia. El silencio, en general, protege a los agresores». La esperanza ahora es «que la fiscalía apele, porque si no lo hace yo lo viviría como una traición más», declaró la joven al 'Corriere della Sera'.

Protestas e indignación

La absolución del conserje ha creado indignación y las protestas de la Asociación de Estudiantes del Lazio, región de la que Roma es su capital. Tullia Narciso, presidenta de esta asociación estudiantil manifestó: «Nos indigna que una vez más un toqueteo no sea reconocido como tal, en esta ocasión por su duración. Es importante sentirse seguro en todas partes, especialmente en la escuela, donde se debería enseñar a eliminara la violencia y la discriminación».

Muchos estudiantes publicaron en las redes sociales videos simulando un manoseo de 10 segundos, un gesto de solidaridad eficaz, porque la duración de una filmación con toqueteo parece que se hace eterna.

Considerando también que es absurdo el medir ciertos manoseos por su duración, el actor Alessandro Gassmann, muy activo en las redes sociales, se solidarizó con la joven con este mensaje: «Si al conserje que metió las manos en las bragas de una menor por solo 10 segundos y fue declarado inocente, le diéramos tres o cuatro patadas en el trasero, pero por solo 10 segundos, ¿también seríamos declarados inocentes?».

Algunos jóvenes han publicado también videos satíricos, como pasarse un semáforo en rojo «dentro de 10 segundos», porque en ese tiempo «no es un delito». La tendencia #10secondi, lanzada por el actor Paolo Camilli, conocido por su papel en la serie «The White Lotus», de HBO, fue replicada y compartida miles de veces, con personajes conocidos como Chiara Ferragni, la «influencer» más famosa de Italia. Camilli invitaba a reflexionar con esta pregunta: «¿Son pocos diez segundos cuando te tocan el cuerpo contra tu voluntad?». En respuesta a Camilli, alguien, hablando de flagrante acoso sexual, escribió: «Parad un segundo y reflexionad cuántos son 10 segundos para un manoseo. Contad. Son una eternidad».

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