Las nuevas tecnologías, asignatura pendiente de los museos

A juicio de Belloso desde hace unos años «no se observa una apuesta fuerte por el uso de las nuevas tecnologías en los museos». Y esta falta de innovación se traduce, según afirma en «una pérdida del interés en el producto cultural».

Para este experto en la aplicación de las TIC en museos, la mayoría de estos centros se han quedado estancados al ofrecer un paquete común que pasa por «una página web más o menos actualizada y una presencia básica en redes sociales que poco a poco nos hace perder el interés». El contraste lo encuentra en lo que ocurre en el ámbito privado del arte «donde se trabaja más activamente en encontrar nuevas iniciativas utilizando las nuevas tecnologías debido siempre a la necesidad de negocio», sostiene.

Los museos están en las redes sociales, pero según Belloso, son pocos los que utilizan todos sus recursos y defiende que estas plataformas «deben ser algo más que simples tablones de anuncios o espacios de publicidad ; deberían ser por sí mismas herramientas de difusión y conocimiento».

En este sentido, afirma que la aplicación de las TIC sirve de vehículo para que los museos se conviertan en espacios frecuentados por los jóvenes , si bien matiza que el objetivo no es sólo conseguir más visitas sino «mejores visitas, cargadas de mayor contenido y que consigan fidelizar al visitante».