Máxima tensión tras la muerte del mantero en el río: un grupo de veinte personas busca venganza y destroza la Jefatura de la Policía Local de Sevilla
Los incidentes han tenido réplicas en distintos puntos de la ciudad en los que se han incendiado contenedores y destrozado mobiliario urbano
La sede de la jefatura policial ha sido asegurada por más de doscientes agentes de la Policía Local y Nacional
Muere un mantero que se arrojó al río Guadalquivir en Sevilla para escapar de la Policía Local
Sevilla
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Iniciar sesiónMás de doscientos agentes de la Policía Local y Nacional han sido requeridos esta noche de urgencia en la sede de la jefatura policial de La Ranilla tras irrumpir en ella una veintena de familiares, amigos y compañeros del mantero ... que había muerto unas horas antes tras caer al río Guadalquivir cuando huía de unos agentes municipales. Tal y como pudo comprobar este periódico in situ, este grupo destrozó la entrada de la sede policial (puertas, ventanas y diversos enseres del mobiliario) en busca de venganza por su amigo muerto. Pese a que dos agentes de la Policía Local de Sevilla habían expuesto su vida al lanzarse directamente al río para tratar de salvar al mantero precipitado, sus amigos pretendieron un ajuste de cuentas que requirió la presencia de todos los agentes disponibles durante la noche de este domingo en las calles de Sevilla, incluidos de la Policía Nacional.
Según pudo saber ABC, esta veintena de personas llegó en actitud violenta a la sede de la Jefatura de la Policía Local de Sevilla con palos y piedras que lanzaron contra la entrada del edificio. Un suceso que ocurría mientras el cuerpo de su amigo, un varón de 43 años y nacionalidad extranjera, aún se encontraba en el Instituto de Medicina Legal de Sevilla tras haberse precipitado al río Guadalquivir a las cuatro y veinte de la tarde de este domingo desde el Muelle de Nueva York, confirmándose su muerte unos minutos después de que efectivos de la Policía Local y Bomberos lograran rescatarlo del agua y realizaran varios intentos de maniobra de reanimación bajo el puente de Los Remedios.
Durante el suceso se vivieron momentos de máxima tensión, por lo que los agentes de la Policía Local que en esos momentos se encontraban en el interior de su sede tuvieron que pedir refuerzos, personándose en el lugar todas las dotaciones posibles de Policía Local y Nacional para tratar de calmar la situación.
Tal y como señalaban diferentes fuentes consultadas por este periódico, durante los primeros momentos de este incidente se produjeron forcejeos entre policías de la Unidad de Intervención Nocturna y los amigos del fallecido, aunque finalmente el altercado pudo ser controlado. Se trata de una de las dos unidades que, tal y como este domingo informó este periódico, busca fomentar el Ayuntamiento de Sevilla para las actuaciones en situaciones de emergencia, como ésta. De hecho, la Delegación de Seguridad acaba de licitar la compra de material antidisturbios para disuadir a los participantes de este tipo de incidentes violentos.
Un detenido
Esta importante actuación requirió que muchos de los agentes que estaban desplazados por la ciudad en sus respectivas intervenciones tuvieran que acudir hasta la sede central de La Ranilla, haciendo falta más de doscientos agentes para parar esta gran avalancha. Por el momento, según ha podido saber este periódico, hay una persona detenida.
Tras disuadirlos, otro amplio dispositivo policial los siguió hasta el entorno del barrio de Los Pajaritos, donde viven algunos de los implicados en este altercado, para evitar posibles nuevos incidentes. Pese a que la situación parece controlada, más de un centenar de agentes se quedaron blindando la fachada del edificio de la Jefatura de la Policía Local de Sevilla. Según advirtieron a este periódico al filo de la medianoche, varios contenedores de basura salieron ardiendo en distintos puntos de la ciudad.
Tal y como informaron los servicios de Emergencias Sevilla, el hombre fallecido tenía 43 años de edad y supuestamente comenzó a correr tras percatarse de la presencia policial en las inmediaciones del Muelle de Nueva York. Tras unos intentos infructuosos de los agentes para calmarlo, este hombre se lanzó al agua «conmovimientos evidentes de incapacidad para mantenerse a flote». Los dos agentes no dudaron en lanzarse al agua para tratar de rescatarlo, «algo que fue imposible al sumergirse sin volver a salir a flote», tal y como confirman fuentes municipales tras adelantar ABC la noticia.
Pasada la medianoche, la sección sindical de CSIF de la Policía Local publicaba en sus redes sociales un mensaje de apoyo a la actuación de sus compañeros, «lamentando que como consecuencia de ella haya fallecido una persona». «Condenamos el ataque que hemos sufrido en la Jefatura por parte de un grupo de personas. La investigación policial aclarará todo lo sucedido».
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