Southern Tourism Meeting
Diversificar las rutas turísticas, una forma de rescatar el patrimonio en Sevilla
La ciudad cuenta con atractivos turísticos a los que se les podría sacar el partido que merecen, lo cual ayudaría a evitar la saturación
Las experiencias son actualmente uno de los criterios a tener en cuenta a la hora de elegir un destino
Sevilla necesita orden para mantenerse como destino deportivo de primer nivel
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Iniciar sesiónNo hay mejor escenario para discutir sobre el turismo patrimonial que Sevilla. Es por eso que la segunda mesa de debate de Southern Tourism Meeting (STM), organizada por ABC con el patrocinio de Acuario de Sevilla, NO&DO, City Sightseeing, Cruceros Torre del Oro, ... MA Abogados y Real Club Sevilla Golf, se centró en ello. Una jornada de la que se sacaron conclusiones como que Sevilla es una ciudad tan rica en patrimonio que es esta la mejor arma para diversificar las rutas turísticas con las que paliar la saturación en determinados puntos; o que el patrimonio y las experiencias son un tándem perfecto para el turismo.
Participaron en este encuentro Isaac Flores, director general de City Sightseeing; Manuel Romero, director de patrimonio del Ayuntamiento de Sevilla; Jorge Robles, CEO de Past View Experience, y Pablo Távora, director de proyectos de Greencow Music y experto en patrimonio.
El debate comenzó con la búsqueda del aumento de las pernoctaciones, un objetivo fundamental en la actualidad para el gobierno municipal. «El aumento de pernoctaciones es fundamental; siempre ha sido un objetivo que hemos percibido, tanto desde la parte privada como el sector público», reconocía Jorge Robles, apuntando que la cifra está actualmente entre las 2,2 y 2,4 noches. Mencionaba las visitas nocturnas de la Catedral, donde la variedad de horarios permite dar un respiro a las horas del día donde se concentra el grosso de público además de ofrecer un producto único. Una oportunidad de visitar el templo con poco más de 100 personas, con actividades exclusivas que tanto benefician al visitante como a la ciudad, al implicar que el turista se quede una noche más.
Por su parte, Isaac Flores añadía que más allá de centrarse en el número preciso, hay que ser conscientes de que «los hábitos de viaje en las nuevas generaciones han cambiado» y que, además, es muy importante colaborar con la provincia, donde hay destinos muy atractivos pero desconocidos. «Haciendo un trabajo conjunto, todas las instituciones públicas, junto al sector turístico, en este caso privado, se puede conseguir que las pernoctaciones aumenten», comentó.
En torno a este tema, el director de proyectos de Green Cow Music añade que no se trata solo de una cuestión «temporal», sino que el cambio también se debe a cómo se consumen los destinos. «Generacionalmente ha cambiado mucho, nos acercamos de una forma diferente a los recursos patrimoniales», apuntaba Pablo Távora. En ese sentido, proseguía con que «no solo hay que buscar esa diversificación de los recursos, sino una diversificación de las experiencias», aquellas que, explicaba, no desvirtúen, por supuesto, la naturaleza del propio recurso patrimonial. Es más, abogó por dejar de pensar en una «Sevilla de postal», donde lo único que se muestra es el patrimonio estrella sin abrir la mirada a otros rincones de la ciudad. Entre esa Sevilla más allá del casco histórico, se hizo referencia tanto a la zona Norte como a Nervión, barrio en el que los autobuses turísticos ya se han añadido en sus circuitos. Este es una de las principales propuestas del Ayuntamiento para diversificar las rutas turísticas.
El director general de Citysightseeing se refería directamente a Icónica Santalucía Sevilla Fest, festival que organizan desde el equipo de Távora. «Hay gente joven, o no tan joven, que no había estado nunca en la Plaza de España y la primera vez que la pisaban es gracias a Icónica», refiriéndose, además, a que en esta edición más del 50% del público de esta no era local. Es más, este festival es uno de los responsables de las cifras de ocupación que se están consiguiendo en la capital hispalense, donde hace unos años era impensable que en julio y agosto se consiguiera un 88% de ocupación hotelera. Asimismo, salió en el debate el tema de las altas temperaturas en Sevilla, algo que podría suponer un grave problema. Explicaba Flores que «a la vista está que aunque haga 40 grados con una buena agenda cultural la gente viene».
Un turista que repita
Esa diversificación es clave para que el visitante repita en la ciudad, que es, a ojos del director de patrimonio del Ayuntamiento, «lo más importante», no tanto las pernoctaciones. La repetición es igualmente crucial para crear nuevas rutas. «El primer año vendrá y verá la catedral, pero el segundo año, y el tercero vendrá y visitará otras zonas, y el cuarto año vendrá porque hay un festival de música», ejemplificaba Manuel Romero, quien sostiene que «turismo y patrimonio han ido siempre de la mano». Explicaba el arquitecto que, a su parecer, el inmueble arquitectónico se ha visto muy favorecido por el turismo ya que mantener ese patrimonio es muy caro, y hace falta una inversión importante. En cuanto al tema experiencial, Romero reconocía que estaba «muy bien», aunque también recalcaba que la ciudad tiene patrimonio inmueble y pictórico «suficiente para que se vuelva».
El CEO de Past View Experience también quiso apuntar que «la gente local es el primer patrimonio de la ciudad», ya que el turista necesita al autóctono. «Lo que te gusta es convivir con la población y no irte a un parque temático donde eres uno más en el atrezo de todo lo que hay», declaraba Robles, quien también se refirió a la labor que el turismo ha hecho en muchos rincones del Centro o Triana, donde se han reformado casas que estaban abandonadas. En esa línea, Távora, quien defiende que se haga buscando siempre lo mejor para el espacio, declaró que debe «desterrar de la ciudad el debate del uso de los espacios patrimoniales», pues «lo que no se usa se pierde», dado que, a su parecer, es la propia sociedad quien decide «qué patrimonio vive y cuál desaparece».
Otro de los temas que se abordaron fue el estrés monumental. «Es injusto lanzar el discurso de que el centro y todos los monumentos están saturados», declaraba Robles al respecto, quien aportó el dato de que la Catedral de Notre Dame de París, que es cuatro veces menor en tamaño a la sevillana, recibe 12 millones de turistas, mientras que la Catedral de Sevilla cerró el 2024 por debajo de los 3 millones. Manuel Romero, por otra parte, sí que señaló que la presión en la seo hispalense y en el Alcázar «se empieza a sufrir», ya que empieza a entrar «en colisión» el estrés de visita con las tareas de mantenimiento.
El directivo de Greencow Music reconoció que se trata de un debate «complejo y desigual». A su parecer, más que medir la saturación por «cuántos turistas más caben», habría que hacerlo de una forma cualitativa. Es decir, hay que analizar el espacio en función de su estrés patrimonial y ver qué recursos se podrían poner a disposición para que este no sufra. «En el Alcázar ya se hablaba de límite hace 20 años; ahora los turistas se han multiplicado, pero el espacio ha mejorado sustancialmente su gestión». Coincidían todos los intervinientes que para ello es fundamental el presupuesto. «No podemos vivir a costa del patrimonio y no invertir en él», añadía Pablo Távora, quien defiende que respecto al debate de si debería de imponerse una tasa turística, cree que la recolección debería de ser finalista. Es decir, reinvertir todo aquello que se recolecta en el monumento para su correcta conservación.
Joyas ocultas
Sobre este aspecto, Isaac Flores apuntó que el «triángulo» Santa Cruz-Catedral y Alcázar es donde se concentra el turismo, por lo que «no hace falta promocionarlo más», sino que se deben reforzar otros flujos. En ese sentido, ponía el ejemplo de Itálica, un conjunto arqueológico único que recibe unas 170.000 visitas a pesar de estar a menos de 15 minutos en coche de la Torre del Oro.
Otro de los ejemplos que se tomaron fue el de la casa natal de Velázquez, una de las pocas corralas en pie del siglo XVII, que recientemente se ha anunciado que Greencow Music pasará a gestionar. «Será que nos sobran genios universales de la pintura», apuntaba Távora haciendo referencia al poco provecho que se le saca. «Velázquez lo medimos por le Prado y por las visitas al prado y aquí en Sevilla tenemos un recursos para impulsar una marca de ciudad y un posicionamiento a nivel internacional muy potente», añadió, quien pese a explicar que va a ser un recurso turístico «pequeño» ya que el inmueble tiene una capacidad limitada, abre la puerta a proyectar un «universo velazqueniano» que hasta ahora no se ha puesto en valor.
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