Tres semanas de vértigo para el plan Ancelotti

Sentados en el césped tras un trabajo de «reactividad», los jugadores dialogaron con el entrenador. Asumían la vorágine que les espera. «Hay que ser optimistas, más quisieran muchos equipos tener este calendario», indicaba Carlo con moral de ganador. El vértigo comienza hoy, en «el partido clave para nosotros en esta Liga». Vencer al Sevilla hoy significaría una doble victoria, futbolística y mental. Es uno de los enfrentamientos más difíciles de esta montaña rusa formada por siete curvas de vértigo, ascendentes y descendentes, todas ellas peligrosas. «Ganar en el Sánchez-Pizjuán es la llave», insistía el máximo responsable del Real Madrid .

Reducir el ácido láctico. El cuerpo técnico abordó este lunes un plan de recuperación, posterior a cada partido, que aplicará durante las tres semanas que marcarán el futuro del club. Estos dos días, los futbolistas titulares han llevado a cabo sesiones específicas para que la acumulación del ácido láctico, producto del excesivo esfuerzo muscular en el clásico, se reduzca a los niveles normales con el fin de volver a jugar hoy con sus máximos potenciales. El pulsómetro también delata el estado de cada profesional. Hay decisiones sobre la titularidad o la suplencia de jugadores que se toman según los datos que aportan estos controles. Muchas veces se elige el mismo día del encuentro. Es, éste, un capítulo fundamental en el trabajo de los ayudantes de Ancelotti. Una misión que se repetirá después de cada uno de estos siete encuentros. Es uno de los secretos del entrenador en todos los clubes donde ha estado.

Hasta ahora, el rendimiento físico del plantel es óptimo y el italiano piensa que mantendrá esta línea hasta el final. El éxito dependerá especialmente del rendimiento de los suplentes. Y de la actuación de los líderes del equipo en la hora de la verdad.

Tras el duelo crucial del Sánchez Pizjuán, el Madrid recibirá al Rayo y luego se enfrentará a siete días en los que jugará dos veces contra el Borussia Dortmund y visitará a la Real Sociedad. Será el periodo determinante de este maratón, con dos títulos en liza.

El italiano afirma que los suplentes serán decisivos en estas tres semanas. Ha hablado con ellos para subrayarles una importancia que antes no vislumbraban clara y ahora observan real. Van a disputar los partidos de la verdad. Es la hora de Isco, de Illarramendi, de Morata, de Varane, de Nacho, de Casemiro y de Coentrao. Dos de ellos serán titulares esta noche en un duelo crucial para la Liga.

«Mea culpa» tras el 3-4. El otro factor humano decisivo es el rendimiento de los jefes del equipo. Tienen que dar el máximo de su calidad en el momento verídico de la temporada. Ancelotti habló claro con los titulares del clásico. Con independencia del arbitraje de Undiano Mallenco, hubo «mea culpa». Bale no estuvo fino ante el Barcelona. Tampoco brilló Cristiano. Benzema marcó dos goles y erró otros dos. Modric no creó pases en ataque. Xabi no repartió fútbol y cometió un penalti evitable. Marcelo no defendió bien. Carvajal falló en el gol de Iniesta. Todos ellos deben demostrar su máximo nivel ahora que los títulos se asoman. Son futbolistas ganadores y han de confirmarlo.

Seis titulares sin excesivo desgaste. El trabajo de Ancelotti es conseguir que sus hombres ataquen cada partido como determinante y evitar el desgaste mental de esa presión que se repetirá cada tres días. «Todos estos partidos son finales», aducen sus jugadores. Cristiano es el primero que da moral: «No bajamos los brazos, continuamos siendo favoritos a ganar la Liga. La tenemos en nuestras manos». El estado físico es fundamental y el cuerpo técnico valora que Bale, Xabi, Carvajal y Marcelo no acumulan excesiva carga de minutos, mientras Ronaldo y Ramos han vivido descansos, no deseados, por sanción. Son Pepe, Modric, Di María y Benzema los que más cansancio acumulan. Pero los cuatro ofrecen buenos datos de recuperación a los médicos entre partido y partido.