El futuro del doblaje, entre la tradición y la ‘uberización’
Crece la demanda y el número de salas de grabación y escuelas fuera de las grandes ciudades
Jacques Barreau, exvicepresidente de Warner Bros, forma a nuevos dobladores a distancia
Desde que dieron el salto a Netflix, El Profesor, Tokio, Berlín y compañía, los atracadores más famosos de la televisión, ya no solo hablan en castellano. «Éxitos como ‘La casa de papel’ tienen esa repercusión mundial, entre otros motivos, porque están disponibles en varios ... idiomas . En contra de lo que se puede pensar, cada vez se dobla más. Incluso en Estados Unidos», cuenta Adolfo Moreno , actor de voz y presidente de Adoma (sindicato de artistas de doblaje de Madrid). Y es que, con la irrupción en el mercado de las plataformas de televisión a la carta –en España el 53 por ciento de los hogares cuenta ya con estos servicios, según la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia–, la oferta global de contenidos se ha multiplicado. El año pasado se estrenaron, solo en EE.UU., casi 500 series.
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«Aunque no es comparable con otros picos como la llegada del vídeo o la irrupción de las cadenas privadas, hay bastante trabajo. Pero está más repartido que nunca. Antes casi todo se desarrollaba en Madrid y Barcelona, pero ahora es más fácil abrir un estudio de grabación que suene bien y han proliferado en muchas otras zonas del país. Incluso se mezclan repartos, parte se graba en las grandes capitales, y parte en otros lugares donde no hay convenio y es, por tanto, más barato», añade el portavoz de estos profesionales sobre un oficio que ha entrado incluso en el debate político después de que ERC exigiera el doblaje de las series al catalán para apoyar los Presupuestos.
Jacques Barreau gesticula durante un doblaje
Hasta ahora, la gran cantera de los actores de doblaje era el teatro y la radio. Constantino Romero, Pepe Mediavilla, Luis Posada, Ramón Langa, Salvador Vidal, Mercedes Montalá, José Luis Gil y Nuria Trifol han sido y son algunas de las voces más reconocibles de la gran pantalla. «Ahora hay también un 'boom' de escuelas de formación, mucha gente que quiere dedicarse a esto. Pese a la tradición que hay tanto en España como en Francia, Italia y Alemania, siempre ha sido un oficio muy desconocido , que gracias a las redes sociales es más visible», argumenta.
A la competencia territorial hay que sumar también la llegada de gigantes extranjeros que apuestan por el ‘teledoblaje’ y la formación de nuevos talentos a distancia. Una tormenta tecnológica perfecta. «Hasta ahora, fuera de Madrid, Barcelona y Valencia no había muchas opciones para desarrollar una carrera. Pero ahora ha crecido la demanda por parte de las plataformas y muchos estudios están llenos, así que, como ya teníamos la tecnología para trabajar a distancia, decidimos crear MediaNEXT Dubbing Academy , una escuela donde los alumnos pueden aprender desde cualquier lugar. Necesitamos nuevas voces, si ves las producciones actuales el 20 por ciento de los profesionales hacen el 80 por ciento de los proyectos. Y esta descentralización da cabida a nuevos talentos», plantea Jacques Barreau , exvicepresidente de Warner Bros y responsable del plan de estudios de este nuevo centro. «Pero nosotros damos herramientas a los alumnos para trabajar tanto en un estudio de grabación como desde casa, donde pueden gestionar sus tiempos», señala el directivo.
La pandemia nos ha servido para probar nuevas tecnologías, pero realmente, quitando alguna corrección, no se realizaron series o películas enteras desde casa. Por el momento, ni las empresas ni nosotros lo vemos viable. No se puede realizar ni al ritmo ni con la calidad de un estudio profesional, insonorizado. Nuestras casas no están acondicionadas para este trabajo. En nuestro último convenio queda recogido el teletrabajo, pero para circunstancias especiales
Adolfo Moreno
Presidente de Adoma (sindicato de artistas de doblaje de Madrid)
«Desprofesionalización»
Es el caso de profesionales como Sigfrido Martín , traductor autónomo: «Siempre me ha atraído el mundo del doblaje. Llevo años reproduciendo los diálogos de las películas, jugando en casa. Pero cuando vi que crecían las ofertas de trabajo combinadas de traducción y locución y que podía estudiar a distancia, me lancé». Su sueño sería poder dedicar parte de su jornada a doblar comedias.
Sin embargo, por ahora los profesionales del doblaje lo tienen claro: «Bajo la deslocalización muchas veces lo que subyace es una desprofesionalización del trabajo y una bajada de precios», reivindica Moreno. «La pandemia nos ha servido para probar nuevas tecnologías, pero realmente, quitando alguna corrección, no se realizaron series o películas enteras desde casa. Por el momento, ni las empresas ni nosotros lo vemos viable. No se puede realizar ni al ritmo ni con la calidad de un estudio profesional, insonorizado. Nuestras casas no están acondicionadas para este trabajo. En nuestro último convenio queda recogido el teletrabajo, pero para circunstancias especiales», señala el portavoz de los actores de doblaje. «Quizás se podría hacer una locución de un vídeo corporativo o un audiolibro con una voz, pero en cuanto metes varios actores no funciona. Necesitamos referencias, un técnico, un director...», plantea Moreno, quien reivindica con orgullo este oficio como una labor artística.
A la competencia territorial hay que sumar también la llegada de gigantes extranjeros que apuestan por el ‘teledoblaje’ y la formación de nuevos talentos a distancia
En cambio, desde organizaciones como el Instituto Coordenadas de Gobernanza y Economía Aplicada , que ha analizado el futuro del doblaje, consideran que esta ‘uberización’ «puede convertirse en una solución necesaria para desbloquear a un sector , otrora reservado a una élite, ampliando el abanico de talentos a disposición de empresas, instituciones y productoras para satisfacer una demanda cada vez mayor».
Un modelo híbrido
Jacques Barreau, que lleva más de veinte años en el negocio, cree que tanto el doblaje tradicional como las opciones de grabación a distancia pueden convivir . «Si tuviera que doblar un taquillazo no lo haría en remoto, pero hay tanto contenido que, producciones más sencillas como documentales o animaciones, que exigen menos interpretación, se pueden hacer a distancia sin problemas», plantea este directivo.
Desde el Instituto Coordenadas de Gobernanza y Economía Aplicada también vaticinan que en el futuro se impondrá este modelo híbrido. «Y los nuevos talentos emergentes también aspirarán a poner voz a los estrenos de las grandes plataformas», zanjan.